La palabra trágica recuperó su
siniestra significación, que adquiere una proyección muy superior cuando se
acompaña de la palabra “forzada”. Ahí aparece la complicidad del Estado. La
desaparición de Santiago Maldonado se produjo 12 días antes de las PASO.
El resultado electoral favorable al
gobierno lo persuadió de seguir bajando intensidad a un hecho que iba
adquiriendo una notable magnitud en las redes sociales, precisamente el
instrumento donde el macrismo se ha revelado muy
hábil. Luego los pies marchando y las pancartas, las paredes, algunos programas
periodísticos que mantuvieron el tema en soledad, interrogaron con una pregunta
sin respuesta: ¿Dónde está Santiago Maldonado? La defensa incondicional de la Gendarmería ensayada
por la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich, precisamente
la fuerza que actuó en el intento de despejar la ruta 40, colocó al gobierno bajo la sospecha de su complicidad. Detalles que
se fueron conociendo posteriormente dieron un margen de credibilidad cada vez
mayor a la hipótesis de Leopoldo Moreau, de un pacto del gobierno con la Gendarmería
por la cual, a cambio de protección del gobierno a la fuerza, la misma llegaría
a conclusiones en la pericia encomendada sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman
que contradijeran la realizada por peritos de la Corte, los que se inclinan
decididamente por descartar el homicidio, conclusión ya adelantada por Clarín. Esto
puede ampliarse teniendo en cuenta que el gobierno le ha encargado las tareas
principales de represión en un clima de creciente conflictividad.
Las distintas versiones insustanciales
revoleadas desde las páginas de Clarín y sus múltiples distribuidoras, se
fueron desvaneciendo al chocar contra la realidad. Posiblemente la que hará camino en el museo de la infamia es aquella de
haber encontrado en Gualeguaychú un barrio donde todos se parecían a Santiago
Maldonado, que tiene una vinculación directa con la nota memorable
publicada durante la dictadura establishment-militar en la que los desaparecidos
estaban siendo reeducados en lugares descriptos como un spa o una colonia de
vacaciones.
El
gobierno se abroqueló detrás de la posición de la Ministra, con instrucciones
bajadas por Mauricio Macri que por ahora le da un
respaldo sin fisuras, por lo que al descartar a la Gendarmería, las hipótesis
fueron cada vez más descabelladas: una República
Mapuche; la Resistencia Ancestral Mapuche como una organización violenta que
pretende crear un Estado independiente; Maldonado asesinado por los Mapuches, o
que fue herido varios días antes de su desaparición en un asalto a un puestero
de los Benetton; que se encontraba extraviado; que se había autodesaparecido
para dañar al gobierno; que había cruzado la cordillera y se encontraba en
Chile; o que fue ubicado luego en Entre Ríos y Mendoza .
La presencia en el lugar de los
hechos de Pablo Noceti, jefe de gabinete de Patricia Bullrich, fue explicado en forma poco convincente, “que
estaba de paso” lo que reforzó la
posibilidad de un operativo minuciosamente planificado.
Eso fue así, ya que antes de la
desaparición de Maldonado, Noceti realizó
declaraciones radiales a una emisora de Esquel, el 26
de julio del 2016, sobre las medidas a tomar frente a los mapuches,
reiteradas Radio AM Sol de Chubut el 2
de agosto.
Las declaraciones de los testigos
mapuches sobre la detención de Maldonado por la gendarmería tuvieron poca
validez jurídica por haberse realizado encapuchados y sin identificación hasta
el 5 de septiembre cuando Matías Santana brinda un testimonio como testigo
presencial con todos los requerimientos jurídicos. La información de las últimas horas que Gendarmería tendría base en el
campo de los Benetton, y que camionetas de los latifundistas hubieran
intervenido en el operativo, remite a antecedentes de empresas como el Ingenio
Ledesma, Mercedes Benz y la Ford, entre otras, cuando colaboraron efectiva y activamente en las desapariciones
de los años de plomo.
La hipótesis del pedido de los
latifundistas al gobierno para escarmentar a los mapuches y la muy buena
disposición del gobierno a los requerimientos del poder económico, pudieron
definir un escenario donde algún imprevisto cambió la planificación. Santiago
Maldonado no es un mapuche y su familia vive en la Provincia de Buenos Aires.
Un hecho que tal vez hubiera quedado circunscripto
al lejano sur si la víctima hubiera sido
un mapuche, al ser un blanco de clase media, la noticia se extendió como un
reguero de pólvora. La mala relación que el gobierno mantiene con los
Organismos de Derechos Humanos, fruto de una diferencia ideológica abismal,
intensificó las demandas y la pregunta: ¿Dónde está Santiago Maldonado?, se
hizo un interrogante para lo cual el gobierno carece de respuestas válidas, y
cada vez se encierra en un laberinto de
oscuridad y complicidad.
A un mes de su desaparición, las
diferentes marchas y concentraciones en todo el país, pero fundamentalmente en
Plaza de Mayo y alrededores, junto a los pedidos internacionales, han colocado
al gobierno a la defensiva y en una situación de creciente asfixia.
Ni siquiera las burdas provocaciones
con olor a servicios mezclados posiblemente con alguna patrulla perdida y
extraviada, al finalizar el multitudinario acto del viernes 1 de septiembre,
pueden desplazar la significación del mismo, más allá de las tapas de Clarín y
La Nación.
A esta altura de los acontecimientos,
la posibilidad de encontrar con vida a Santiago Maldonado se debilita
diariamente.
Nada debe descartarse. Incluso la
posibilidad de su aparición sin vida lejos del lugar de los hechos, para dar
verosimilitud a algunas de las hipótesis oficiales enarboladas.
LA
MUERTE ARGENTINA
La desaparición es
conocida como la muerte argentina. En la Marcha de la Revolución Libertadora
premonitoriamente se la menciona: “Entre los héroes de la patria amada/ Y
cuando el paso firme/ De la Argentina altiva de mañana/ Traiga el eco sereno/
De la paz de tu sangre conquistada/ Cantarás con nosotros camarada/ De guardia
allá en la Gloria Peregrina/ Por esta tierra de Dios tuviera/ Mil veces una muerta
Argentina/ Mil veces una muerte Argentina”
La Marcha vincula
no solo en la letra a la Revolución Libertadora con la dictadura establishment
-militar.
La desaparición de
Santiago Maldonado no transforma al gobierno que preside Mauricio Macri en una
dictadura, más allá de sus rasgos crecientemente autoritarios y la sospecha de
su complicidad en la negativa de investigar la gendarmería. La banalización del
lenguaje político y las categorizaciones equivocadas tienden a confundir la
caracterización de los procesos históricos. El macrismo
es un fenómeno complejo que merece ser estudiado antes que ser denostado fácilmente.
Llegar a la presidencia con un partido de sólo 14 años, por fuera de los dos
partidos tradicionales y en alianza con el más antiguo, gobernar la ciudad de
Buenos Aires durante 10 y por lo menos 12 años, con triunfos en todos los
distritos y mantener su caudal electoral en un contexto económico
extremadamente desfavorable, deberían alejar cualquier intento de subestimación.
Su plan económico conduce inevitablemente a una crisis profunda, en un plazo
difícil de pronosticar.
Reitero: la
necesidad de los ajustes brutales preanunciados requiere de las fuerzas de
seguridad para reprimir la protesta social. Ahí pueden encontrarse otras de las
puntas del apoyo sin fisuras del gobierno a la gendarmería en la desaparición
de Santiago Maldonado.
A esta altura de los acontecimientos,
todo indica que la suerte de Patricia Bullrich está
jugada. Es un fusible que deberá saltar para atenuar el incendio creciente del
gobierno, que como tantas paradojas actuales no afecta a su base electoral.
Incluso declaraciones de la diputada Victoria Donda, demuestran que la Ministra
emprendió un camino de complicidad al barajar en privado la
posibilidad de que a un efectivo, quizá, se le haya "ido la mano" con
Maldonado.
Marcos Peña, el jefe de gabinete, el hombre a
través del cual habla el Presidente, declaró: “ Estamos muy contentos con el
trabajo que está haciendo Bullrich”
El poder económico, que con diferencias secundarias,
apoya decididamente al gobierno y observan con preocupación una crisis que el
oficialismo ha dejado crecer con una torpeza y lentitud que no ha tenido con la
policía bonaerense o la aduana, primero exagerando superlativamente un clima de
violencia que fue fundamentalmente originada en la represión policial y luego
34 días después expresando preocupación “ que todos compartimos
por Santiago Maldonado y su familia” Resulta absolutamente inverosímil que nada
menos que la Sociedad Rural, la Cámara de Sociedades Anónimas, la Asociación
Empresaria Argentina, la Asociación de Bancos de la Argentina, entre otros, se
preocupen por Santiago Maldonado. Algunos de los grupos económicos fueron
cómplices y beneficiarios del terrorismo de estado, cuyo juzgamiento empezó a
naufragar con el arribo de Cambiemos al gobierno.
La reacción del gobierno de Mauricio
Macri, en el día 36 de la desaparición, no es fruto
de una súbita preocupación por la vida de Santiago Maldonado, sino porque las
encuestas le dan un alto conocimiento de la población sobre el caso.
DESAPARECIDO
Hay un porcentaje
de la sociedad argentina, difícil de cuantificar, en el que la desaparición de
una persona constituye afortunadamente un hecho insoportable que implica la
necesidad de movilizarse y actuar. Hay otro sector de la población que le
resulta indiferente o que raspando en la superficie de sus posiciones lo
justifica. Buena parte de este sector vota al oficialismo. Es por esto que la
desaparición de Santiago Maldonado no influyó en las elecciones del 13 de
agosto y es altamente probable que no tenga ningún efecto en las definitivas de
octubre. Siempre todo vaticinio debe ser relativizada, porque en nuestro país
la caja de Pandora, está abierta a las sorpresas.
En ese segundo
sector son corrupción inaceptable los bolsos de López, que lo es, pero les
resulta absolutamente indiferentes la fuga de capitales, las empresas
off-shore, que los principales funcionarios del gobierno tengan sus bienes y
dólares en el exterior o que funcionarios, amigos y familiares del presidente
hayan blanqueado alguna parte de sus patrimonios por alrededor de 132 millones
de dólares. Eso es un robo liso y llano más allá de las etiquetas y eufemismos
con que se los envuelve.
En la Argentina la desaparición de personas por el
terrorismo de estado tiene como contrapartida la desaparición del territorio
nacional de los excedentes evadidos por los empresarios.
Desde el optimismo
de la voluntad, la poesía es un buen refugio para no desesperanzarse
Una amiga de
Santiago Maldonado, Eliana Cosí es una de las tantas personas
que conocieron a este joven. El encuentro fue en El Bolsón, y le dejó un
recuerdo que le llevó a escribir: "Un poema para que aparezcas". Para
ella, "desde que Santiago no está, el mundo cambió".
Es la mejor forma
de cerrar una nota que no encuentra final.
Un
poema para que aparezcas
¿Dónde
está el Brujo?
¿Se
quedó durmiendo entre los pinos que bordean el cerro?
¿Juntando
hongos en la lomada que está detrás de la casa de Amelia?
No
teníamos ventana en ese lugar
había
fogón,
y
estábamos un poco de prestado
para
mí.
Para
él todo era nuestro
o
de nadie.
Yo camino como si pidiera permiso,
el camina como si el dueño nos debiera
algo.
Yo
no creo en la magia, ni en los astros.
Casi
que no creemos en nada
pero
a destiempo del otro.
Casi
que somos planos anómalos para los entendimientos cotidianos,
casi
que dije te quiero sin querer
porque
conozco las diferencias,
y
te veo entrar,
y
me acurruco en tu brazo con un mapa,
si
funcionó de excusa una vez, seguro funciona otra,
y
otra.
Tomo
el mapa para buscarte, brujo,
en
qué camino andarás cortando manzanas para mí,
que
le tengo miedo a la noche cuando cae sin luces permitidas,
y
me apuro por miedo al tiempo que se pierde, y vos te parás para girar a la
luna.
Ahora
cierro los ojos y te veo bajando a oscuras el cerro,
mirando
con tranquilidad mi impaciencia, contemplando con ternura mi temor a la
oscuridad.
Dijeron de vos tanto de todo,
No hablaron de tu ternura.
Yo quiero tu voz para que no sea verdad, para
poder seguir creyendo,
porque sino volvés,
sino volvés perdí y tenías razón,
si no volvés y yo vuelvo,
ya no voy a poder creer en nada.
La
academia y mis dioses, las ciencias y sus aparadores, los congresos con sus
certificados,
Las
proclamas y los santos
van
a humedecerse,
se
van a despintar las paredes,
las
caras van a ser iguales/repetidas/mentirosas/de crepe y engrudo.
Si
no volvés voy a tener que creer
en
las pintadas anónimas, en la poesía.
Porque si la poesía no sirve para gritar
que aparezcas,
a esa poesía la rompemos a patadas
y hacemos una nueva que te encuentre,
y construya puentes para tu abrazo tibio.
Si
no volvés,
Y
no fanfarroneas tus ojos,
y
tus consejos sobre las plantas al costado del camino,
voy
a tener que creer en hadas y brujos de cuentos libertarios.
06/09/2017
Excelente post, como siempre.
ResponderEliminarEl comunicado hipócrita de la Sociedad Rural, la Cámara de Sociedades Anónimas, la Asociación Empresaria Argentina, la Asociación de Bancos de la Argentina, etc. etc. etc., no es tanto un apoyo a la búsqueda de Maldonado (mencionado casi al pasar y como telón de fondo) sino una queja por los desmanes y el desorden en las manifestaciones contra el Gobierno.
Felicitaciones Hugo Presman, la desaparición forzada es algo que en la Argentina no se puede dejar pasar. Además el gobierno amarillo se encuentra acorralado por su incompetencia no solo acá sino en el exterior.
EliminarEn cuanto al comunicado hipócrita no puede engañar a nadie pero por algo se dice que la hipocrecía es el homenaje que el vicio rinde a la virtud.
Desaparecieron a un brujo.
ResponderEliminar¿Se equivocaron?
¿Es la providencia?
¿Qué castigo les espera?
La venganza tehuelche. Maldonado está con Patoruzu. No Jordán más
ResponderEliminarhttps://es.wikipedia.org/wiki/Desaparecido_(pel%C3%ADcula)
ResponderEliminarhttps://es.wikipedia.org/wiki/Charles_Horman
...."A mediados de 1973 preparábamos un paquete mensual de noticias y análisis para La Nación, El Siglo, Clarín y otras publicaciones, con reportajes sobre las relaciones EE.UU./Chile que tuvieron gran circulación"...
Steve Volk
¿CAMPO OREGANO?
http://www.enorsai.com.ar/politica/22903-aprueban-el-ingreso-de-militares-extranjeros-a-la-patagonia.html