El jueves 17 de noviembre, día del
militante, se subió a EL TREN, el joven diputado del Movimientos Evita Leonardo
Grosso. Un viaje a las profundidades del movimiento social que acaba de cumplir
una década. ¿Cual es su estrategia?
¿Cómo es su arco de alianzas? ¿Cual es
la relación con el kirchnerismo? ¿Cual es la visión del diputado de la ex
presidenta? ¿Como negocian con el macrismo y lo
enfrentan? ¿Cual es su opinión de Carolina Stanley y María Eugenia Vidal? ¿Puede
haber un acuerdo con el Frente Renovador? Un recorrido de 58 minutos en que
casi no quedó pregunta por formular. Todo lo que Ud. quería sobre la
organización más numerosa e importante en la actualidad. ¿Se lo va a perder?
¿Se va a quedar en el andén mientras EL TREN se va? Seguro que no. Entonces
súbase, acomode el equipaje, busque su asiento que partimos.
El TREN, UNA VOZ DIFERENTE PARA ESCUCHAR,
REFLEXIONAR Y DISCUTIR
UN PROGRAMA QUE NO TE LA DEBE, QUE SÓLO CIERRA, CON TODOS SUS OYENTES
ADENTRO
Hola.
ResponderEliminarTe escribe Carlos López, un placer saludarte.
Quería hacerte una propuesta de beneficio mutuo con el blog que manejas , si estas interesado y quieres te informe un poco más sobre dicha propuesta, esperamos una respuesta de tu parte confirmándonos para así poder enviarte toda la información necesaria con respecto a lo mencionado.
Quedo a tu disposición y a la espera.
Puedes contactarme a través de carlosl@iiemd.com o indicarme un email de contacto y con gusto te envío la información.
Saludos cordiales.
Carlos López
Hugo. Te adjunto transcripción de los temas que para mi fueron mas interesantes
ResponderEliminarEl mundo del trabajo tradicional, fabrica – patrón, ha cambiado. Un tercio de los trabajadores queda fuera y hoy día es casi un lujo ser explotado por el capitalismo. En el 2001 se aprendió que peor que ser explotado es carecer de la posibilidad de ser explotado.
Hay una masa trabajadores que todos los días sale a laburar. Vende tortillas en la parada del colectivo, corta el pasto o un laburo independiente y tiene un monotributo y representan un 35% de la clase trabajadora, con un salario que no llega al mínimo y esta exento de todos los beneficios del trabajo registrado.
Si se recompusiera el salario social, se deberían invertir entre 40 y 50 mil millones. Si pueden perdonarles las multas a las eléctricas, la plata está. Y es mas grave ese perdón porque esas multas fueron consecuencia de la mala prestación del servicio. Inversión no generada la giraron al exterior. La civilización puede definirse con electricidad o sin electricidad. El estado puede generar recursos imponiendo un gravamen para las empresas que giren dividendos al exterior y gravar los plazos fijos en dólares, desde un determinado monto.
Las entidades bancarias que mas dinero han ganado durante este gobierno deberían pagar un impuesto vinculado a las sobre utilidades y eso seria mas efectivo que cualquier gravamen extra.
La ley de emergencia económica plantea la necesidad de establecer un salario social complementario para construir un piso de derechos desde el cual todos los trabajadores puedan llegar al mínimo vital y móvil.
No nos iríamos con Massa y coincidimos con Cristina en la necesidad de construir un gran frente social que enfrente a Macri.
Tenemos una relación institucional no política, con Carolina Stanley ya que jamás podríamos tener una relación política con ningún macrista. El movimiento Evita tiene un desarrollo enorme en términos sociales. Cooperativas, empresas recuperadas, merenderos, comedores y la obligación de defender las políticas publicas de los últimos doce años.
Así como el trabajador tiene la obligación de sentarse con el patrón a negociar la paritaria nosotros también tenemos la obligación de sentarnos con el ministerio de desarrollo social y eso no es hacer política con Macri. Decir son todos chorros, con esas expresiones pretenden desprestigiar a la política como herramienta y que es absolutamente funcional a enterrar un proceso político como el Kirchnerismo que reincorporo a la política a miles de jóvenes. Hasta que Kirchner no demostró que desde el gobierno se podía convocar a las masas y combatir al poder real, yo no creía en la política. La militancia es una agrupación de fuerzas que utiliza el pueblo para defenderse de los abusos a la que lo someten aquellos que tienen los medios, el poder económico y la pata judicial para llevar adelante sus planes. Nosotros desde el campo popular necesitamos militar, organizar a los descartados, a los desechados como a los que están afuera y darles a todos aquellos al los que el sistema deja afuera. Estoy en contra de cualquier forma penal de resolver los problemas sociales.
Si construimos la unidad de los sectores sociales, salimos a la calle y no la perdemos, Macri no va a poder incrementar el ajuste, que en última instancia es transferencia de recursos a los sectores mas concentrados. No hay posibilidad de combatir el proyecto macrista sin el pueblo como protagonista.
Asistimos a un retroceso enorme. Todo ese pequeño avance que habíamos hecho durante el kirchnerismo, hoy esta para atrás y solo discutimos la agenda de las corporaciones.