Por Juan Grabois
Todos, en especial los que llevamos en las venas sangre del sufriente pueblo judío, deberíamos preguntarnos cómo explicarle a nuestros hijos que matar a siete civiles israelíes es terrorismo pero matar a cientos de civiles y decenas de niños palestinos no lo es. Cómo explicarles que es justicia no ya devolver bien por mal sino aplicar la ley del talión multiplicada por diez. Cómo explicarles a nuestros hijos que criticar al Estado de Israel es sinónimo de estar a favor del terrorismo antidemocrático, pero bombardear un edificio entero de medios internacionales de comunicación es defender la democracia. Cómo explicarles a nuestros hijos que es un acto de defensa legítima que soldados armados hasta los dientes pueden detener, golpear y torturar niños que tal vez tengan la misma edad que los nuestros.
Y si no encontramos explicación para darles, tal vez podamos enseñarles algo que los argentinos sabemos bien: no hay peor terrorismo que el terrorismo de Estado. Frente a un conflicto, el que más poder tiene, tiene la mayor responsabilidad en buscar la paz y evitar la violencia ¡Frenen la masacre!
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