30 noviembre 2018

REPORTAJE A EDUARDO VALDÉS

El miércoles 28 de noviembre se subió a EL TREN, el dirigente político Eduardo Valdés, quien fue Embajador en el Vaticano durante la presidencia de Cristina Fernández. Desde diciembre de 2015 es miembro del Parlamento del Mercosur por el Frente para la Victoria. Es dirigente del Partido Justicialista en la Ciudad de Buenos Aires.

Un viaje imperdible al corazón de la realidad y lo que pasa en el peronismo. ¿Se lo va a perder? Escuchar el reportaje en estos días del G20, es reconfortante y esperanzador.
No se pierda esta oportunidad única. No se va a arrepentir. En el remoto caso que lo haga, le devolvemos el pasaje. Estamos partiendo. Suba, póngase cómodo, acomode el equipaje que partimos. ​

                           EL TREN, UNA VOZ DIFERENTE PARA ESCUCHAR, REFLEXIONAR Y DISCUTIR      
                                UN PROGRAMA QUE NO TE LA DEBE, QUE SÓLO CIERRA, CON TODOS SUS OYENTES ADENTRO

27 noviembre 2018

UN CHICO COPPOLA*



Veintidós años después llegó un chico Coppola, en el traje de un economista. Allá por octubre de 1996, en las postrimerías del menemismo, un presunto caso de droga llevó a la cárcel de Caseros durante 97 días a Guillermo Coppola, defendido por su amigo Diego Maradona, mucho antes de la ruptura, y la participación de un grupo de chicas noctámbulas que cobraron notoriedad en un programa de los mediodías que conducía Mauro Viale y que batía récord de audiencia cuando las mismas se peleaban y desnudaban sus intimidades. Una de ellas, Samanta Farjat, que tenía 19 años entonces, le declaraba al diario La Nación dos décadas después: “A todo ese grupo de gente nos faltaba un jugador”. Cuando terminó el escándalo, el que fue a la cárcel fue el juez federal de Dolores Hernán Bernasconi, que llevó adelante la investigación.  Otro personaje que emergió de aquella degradación televisiva y aún permanece es Jacobo Winograd. 
Menem es hoy una ausencia fantasmal, pero el clima de la época macrista tiene puntos de contacto con aquella década infame. Por eso vuelven aparecer personajes excéntricos, disparatados, autoritarios, violentos, que son cooptados por diferentes programas televisivos. El más mediático es un economista que vive en los medios y cuya popularidad es manifiesta y que se llama Javier Milei. 
Si en los noventa tallaron gurúes como Miguel Ángel Broda, con la saliva escapándose por la comisura de sus labios mientras celebraba el cierre de empresas; Daniel Artana, Roberto Cachanovsky, Carlos Rodríguez, etc.

Infalibles para el error, el tiempo los ha afectado mientras el establishment necesitaba nuevas caras. Cuentan con la supervivencia de José Luis Espert, con mucha prensa y veleidades presidenciales; Juan Carlos De Pablo, con su entrador lenguaje con estaño; y Carlos Melconián, una especie de pequeñísimo y apócrifo Elisa Carrió económico, con su fuego amigo para el gobierno. Entretanto irrumpen economistas jóvenes, pero ideológicamente viejos como Martín Tetaz, el violento German Fermo, el irritable y primitivo Miguel Angel Boggiano, Fausto Spotorno, el veterano pero eternamente joven Martín Redrado; pero fundamentalmente el que más horas acumula en los medios es el excéntrico y bufonesco Javier Milei.


Es integrante de un “Partido Libertario” de reciente creación, el que en su plataforma invita a formar parte “de una Argentina libre”. No hay que confundirse: no es una propuesta a una Argentina libre de la dependencia extranjera sino del Estado. Sus futuros representantes se comprometen que “nunca promoverán o adherirán a proyectos que impliquen aumento de funciones del gobierno y a cualquier creación de nuevos impuestos.” El objetivo es impulsar su propio candidato en 2019. El proyecto libertario lo proclaman economistas como Javier Milei, José Luis Espert, Roberto Cachanovsky, entre otros. En su página pueden leerse adhesiones de Ricardo López Murphy que expresa: “Tengan ustedes, mi afecto, mi apoyo, mi comprensión, mi solidaridad, y sobre todo, mi enorme simpatía al esfuerzo que están llevando a cabo”. A su vez José Luis Espert escribió: “Ustedes son nuestro futuro. No nos fallen a nosotros” Desde su twiter celebró Miguel Angel Boggiano: “Que vuelva a existir un partido liberal, que no tenga vergüenza de llamarse así y que tenga convicciones claras de libre mercado. Basta de intervencionismo!! Basta de políticos sin la menor idea de las leyes económicas”.
Sostiene el Partido Libertario: “Lo único que necesita el populismo para triunfar, es que los liberales no hagan nada. Llevamos 80 años de decadencia en la Argentina con 30% de pobres, gracias a la aplicación de políticas populistas que ponen al Estado como el principal agente de la sociedad.” ¿Cuál es la Argentina a las que aspiran?  No se andan con eufemismos: “ Tenemos que volver a aplicar las políticas liberales, impulsadas por Alberdi, que se llevaron a cabo entre 1880 y 1928 y nos convirtieron en un país rico y desarrollado” Así concretan acciones como cuando limpian la 9 de Julio por la suciedad que quedó después de la gigantesca manifestación realizada bajo la consigna “La Patria está en peligro”.Textualmente escribieron en un comunicado del 9 de julio del 2018: “Expresamos nuestro enorme repudio a la que consideramos una muestra más de los daños que realiza la política populista al país. Marchas como las de hoy que dicen defender lo público terminan haciendo pagar a todos los ciudadanos la basura de unos pocos”
EL CHICO COPPOLA
Intemperante, de una violencia apenas contenida la que brota libremente cuando alguien lo cuestiona, sus enemigos principales son el Estado, los políticos, el keynesianismo. A ellos les dedica frases como estas: “Tenemos que darnos cuenta quién es nuestro verdadero enemigo. Nuestro verdadero enemigo es el Estado”; “El Estado es el pedófilo en el jardín de infantes con los nenes encadenados y bañados en vaselina.  Y los políticos son los que ejecutan el Estado. Entonces, nuestros verdaderos enemigos son los políticos”. “No podés tener buena moneda si tus políticos son una basura”; “Argentina es mucho peor que Sodoma. Escuchás hablar, ya sea a Marcos Peña, a Massa y Stolbizer o a Cristina, la reina de los sodomitas, sentís que va a entrar acá y te van a afanar todo. No salís ni siquiera con una mano atrás y otra adelante porque te van a cortar las manos” Su mentor económico es el ya fallecido Milton Friedman de la escuela de Chicago, la misma ciudad que cobijó al mafioso Al Capone. La cantidad de muertos que en el planeta han provocado las políticas de Friedman, deja a Cara Cortada en casi un benefactor de la humanidad. Escribió Milei: “Milton Friedman dedicó su vida académica a desenmascarar el fraude intelectual ideado por John Maynard Keynes y sus seguidores quienes dedicaron su vida al culto de la religión del Estado”. Su otra referente es la licenciada en filosofía, la rusa nacionalizada norteamericana que llegó a la fama bajo el pseudónimo Ayn Rand, autora de dos novelas que el presidente Macri admira y obsequia: “El desafío de Atlas” y “El Manantial”, en donde el altruismo es un pecado, los empresarios son héroes y el Estado es el enemigo. Por eso no es de extrañar que Milei considere que la justicia social es un despropósito. Así escribió: “Al investigar sobre la base de los reclamos por justicia social, encontramos que los mismos se apoyan en el descontento que el éxito de algunos hombres produce en los menos afortunados, o para expresarlo directamente, en la envidia. De hecho, la moderna tendencia a complacer tal pasión disfrazándola bajo el respetable  ropaje de la justicia social  representa una seria amenaza para la libertad” Por si no queda claro, en un acto en la Universidad de Belgrano, en el mes de agosto, conmemorando el día del abogado, junto a José Luis Espert, en donde fueron vivados y homenajeados, lo dejó más claro aún: “Cuando el Estado interviene en la distribución del ingreso es como un ladrón que luego de cometer un robo, reparte el botín entre los pasajeros de un colectivo”. Queda claro: el mercado es el mejor distribuidor del ingreso y toda intervención del estado para mejorar las injusticias que se producen es una “seria amenaza para la libertad”. En esa misma línea, el referente libertario sostiene que las soluciones comienzan por la eliminación del Banco Central. Predica que los impuestos son un robo. Ha sostenido que “… economistas como Piketty, Stiglitz y Krugman, los bonachones del izquierdismo, en realidad pierden contra el capitalismo tanto en generación de riqueza como en crecimiento económico”
 ¿A que político admira el chico Coppola?  Al estrafalario diputado salteño Alfredo Olmedo que aspira a ser el Bolsonaro argentino, quien le devuelve gentilezas y afirma que cuando llegue a la Presidencia su Ministro de Economía será Javier Milei. Y este le retribuye gentilezas cuando afirma: “Compartimos con Olmedo que el Estado es el mayor enemigo de los individuos libres. Achicar el Estado es volver a ser un país rico. Al único político al que escuché decir algo interesante es a Olmedo.” Preguntado sobre Jair Mesias Bolsonero contestó:   “Me pone muy contento en el sentido de que en cada lugar que pierda la expresión del Foro de San Pablo me pone feliz” A la pregunta del periodista de que significaba eso contestó: “ Que pierdan los zurdos hijos de puta”
En economía elogia a Domingo Felipe Cavallo al que considera “el mejor ministro de economía de toda la historia” y es un propagandista de las virtudes de Federico Sturzenegger. El Ministro de Economía, padre de la convertibilidad, le agradeció el elogio diciendo: “Milei fue muy valiente” 
EL CHICO COPPOLA (1)
Hijo de la educación privada, es Licenciado en Economía de la Universidad de Belgrano, con posgrados en el Instituto del Desarrollo Económico y Social y la Universidad Torcuato Di Tella. Profesionalmente fue economista jefe de la AFJP Máxima y economista jefe en el estudio Broda. Fue economista senior en el Banco HSBC.
Desde esa formación, no es sorprendente que considere la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires “el principal productor de los economistas argentinos, un centro de adoctrinamiento marxista que da como resultado la proliferación ubicua de los brutos keynesianos”
La descalificación es su principal argumentación: a la periodista Teresa Frías, en Salta, la calificó de burra, cuando le hizo una pregunta sobre Keynes después que diera una charla y cuando alguien del público salió en su defensa le contestó: “Lo tuyo es un acto de populismo barato. Sos un impresentable, porque la falta de respeto es hablar sin saber. Yo no le falté el respeto a nadie, la falta de respeto es hablar sin saber” A Beto Casella que lo cruzó afirmando “Reconozca, Milei: en su cabeza limitada hay un país para pocos” le dijo: “Pedazo de sorete”.
A la abogada Natalia Volosín, en Intratables, que le pidió “discutir argumentos y no falacias “ad hominem”, le contestó: “No sabés dibujar un cero con un vaso. No debés ni saber sumar”
Sólo algunas de las muchas descalificaciones e injurias brutales que propala diariamente, donde reitera expresiones como ratas, estúpidos, parásitos, lacras, chorros.
Jorge Luis Borges decía al respecto: ‘Para injuriar, ni siquiera un lenguaje se necesita”         
EL CHICO COPPOLA (2)
Arquero en su adolescencia, jugó en ese puesto en las inferiores de Chacarita; integrante de una banda de rock siendo joven, consumado maratonista de larga distancia en relaciones sexuales con la práctica del sexo tántrico, del que se proclama profesor, apodado “vaca mala”, participante según él de tríos sexuales, imitador de Leonardo Favio, vive sólo enamorado de su perro, un mastín gigantesco que responde al nombre de Conan. Se da tiempo para tener su propio programa de radio en internet “Conexión abierta” llamado “Demoliendo mitos” En él  aparecen como colaboradores o invitados el economista Diego Giacomini, “la versión seria” de Javier Milei, es decir, falacias monetaristas bien envueltas; del economista “libertario” Gustavo Lazzari y del historiador reivindicador del terrorismo de estado Nicolás Márquez, autor de “ La mentira oficial”, “El canalla, la verdadera historia del Che”; un libro sobre Evo Morales bajo el título “El impostor”; sobre Rafael Correa “ El cuentero de Carandolet”, “Perón, el fetiche de las masas”, “El libro negro de la nueva izquierda.”
El chico Coppola es autor de “Lecturas de economía en tiempos del kirchnerismo”, “Política Económica Contrarreloj” y en colaboración con Diego Giacomini “Maquinita, Infleta y Devaluta” y “Otra vez sopa: maquinita, infleta y devaluta: ensayos de economía monetaria para el caso argentino.” Y no falta un libro sobre una de sus obsesiones denominado “Desenmascarando la mentira keynesiana. Keynes, Friedman y el triunfo de la Escuela Austriaca.”
Su absorbente presencia televisiva lo ha llevado al teatro donde protagonizará “El consultorio de Milei” junto a Diego Sucalesca y Claudio Rico con la dirección de Nito Artaza.
Como se ve un currículum perfecto para que un productor astuto e inteligente como Mauro Viale, siempre caminando con la banquina del amarillismo al lado, que en los noventa inventó las chicas de Coppola, haya encontrado su prolongación en Javier Milei, el chico Coppola, al que tiene como columnista en su programa de fuerte impacto de los domingos, que por esas jugarretas del lenguaje se denomina: “Mauro: la pura verdad”
Discépolo escribió un tango que es casi una Biblia porteña: Cambalache. En su versión actual mezclaría a Samanta Farjat y Natalia De Negri, dos de las chicas Coppola con Javier Milei, chico Coppola, protagonistas todos en el mismo escenario, conducido por Mauro Viale.
  • Publicado en la Tecla Ñ
18-11-2018