20 enero 2013

TIEMPO DE VERANO


          

 El calor provoca cortes de energía sin que el gobierno ni las empresas crean que tengan que dar ninguna explicación.
            Ante la falta de noticias, los medios hegemónicos acuden a su imaginación: Clarín da como primicia actual el secuestro y crimen de un empresario ocurrido en el 2007, donde se había pedido un rescate de quince mil pesos. Los periodistas del multimedio sin chequeo alguno le dieron la razón a Moreno y los índices del Indec: el monto del rescate se mantenía inalterable aunque el paso del tiempo lo había reducido significativamente.
            Horacio Tellechea, el intendente de Necochea a punto de ser desplazado por presuntas irregularidades y el accionar concreto y sesgado de concejales que responden al Momo Venegas con la promoción de Clarín, aparece fotografiado al lado de una pileta Pelopincho que habría inaugurado un año atrás. Más allá de la verosimilitud de la anécdota, es significativa como ejemplificación de  la tendencia de hacer actos grandilocuentes por motivos, que en muchos casos debería contar con la presencia de funcionarios de menor jerarquía de los que concurren. Ni hablar de aquellos que se inauguran cuando se anuncian, cuando se licitan, cuando se empiezan, cuando avanzan, cuando se vuelven a reiniciar y finalmente cuando concluyen. Una muestra de la actual forma de hacer periodismo es el tratamiento del caso citado: una radio oficialista entrevista al intendente cuestionado y una radio virulentamente opositora al concejal Alberto Esnaola del radicalismo que encabeza la ofensiva contra Tellechea. Difícil conocer la defensa y la acusación si uno se queda con un solo medio.
            Y ya que hablamos de cómo se hace periodismo:  Carlos Ares, quien está a cargo de todo el área de medios macristas, sin que se tenga noticias que haya renunciado, esconde tal condición y escribe una columna de opinión en el bisemanario Perfil, en un tono desconsiderado, bajo el título: “Mensaje a Cristina. Deje de mentir”.
            Una caracterización  de moda es la brecha social que  provoca el fogoneo del odio atribuido al gobierno. Al respecto contesta el periodista Carlos Barragán: “Lo interesante es que cuando Campanella le dice chupaculos (sic) a Barone, nadie lo acusa de agresivo. Cuando Darín acusa de chorra a la presidenta nadie lo acusa de agresivo. Cuando Lanata dice lo que dice cada vez que abre la boca a nadie, pero a nadie, se le ocurre comentarle que es un tipo violento. Cuando Birmajer o Borensztein hacen sus chistes cargados de ataques misóginos, racistas, cuando no fascistas, nadie les dice nada. Cuando Nelson Castro le habla a la presidenta como quien le habla a un delincuente, a un pelotudo, a un sarnoso, a un dictadorzuelo estúpido y autoritario, a nadie se le ocurre decirle a Nelson que hacer eso es de una bajeza y una impostura tal que debería evitarlo por su propia dignidad. Hablarle a un presidente con esa cara de asco, con esa pose de “se lo digo a usted, sorete” debería ser –diría Pino- un escándalo. En los posteos del diario Clarín digital se pueden ver día tras día comentarios donde tratan a la presidenta de chorra, de kretina y konchuda (con ese truco de la K que ya deprime) y de puta (todo esto es pura literalidad, sólo hace falta entrar y leer) mientras se quejan de la falta de libertad de expresión y de la violencia del gobierno. Pero Campanella (chupaculos es su palabra clave) se solidariza con Darín por el ataque que recibió de la presidenta….”
            Ricardo Darín,  su carta, y la contestación de la Presidenta han  sido otros de los hits de enero. Su publicación alineó a todos los medios hegemónicos atrás y la descalificación del actor en  los medios oficialistas. Luego Darín rectificó buena parte de sus  dichos, Justificó la respuesta de Cristina Fernández aunque le señaló algún error significativo y los alineamientos variaron: contra el actor los medios dominantes, a su favor los medios pro- gobierno.
            Como se ve todo el periodismo es militante. La diferencia está que los que apoyan al gobierno no lo ocultan y los que se oponen afirman descaradamente que son “profesionales” e “independientes”. En ese error cae el periodista Daniel Muchnik en su nota publicada en el diario La Nación del 17 de enero: “Para dar testimonio no se puede servir al poder político, ni ser un mensajero de comunicados oficialistas, ni simple observador con ausencia de compromiso, ni dejar de cuestionar, cuando fuera necesario, los actos del gobierno…..Los únicos “periodistas militantes” que he  conocido fueron los colegas peronistas revolucionarios que elaboraron, con el dinero de los Montoneros, el diario Noticias, en la década del sesenta (debió decir setenta). También, los integrantes del ERP que publicaban el diario El Mundo, cuando se jugaba la batalla por el cambio y la toma del poder.” Es llamativo que Muchnik, que sin ser economista se dedicó al análisis económico teniendo aciertos significativos con sus críticas certeras a la convertibilidad, como Licenciado en Historia no advierta que está escribiendo en el diario que nació militante y que ha mantenido esa línea imperturbable a lo largo de los 143 años de su longeva existencia. Al autor de “Aquel periodismo” le sucede lo que los autores de novelas policiales conocen hasta el hartazgo: el arma asesina debe estar a la vista para permanecer oculta.
            Un escritor prolífico, un intelectual ex peronista reconvertido al mitrismo, Alvaro Abos, desde las páginas ensangrentadas del matutino La Nación, donde columnistas y lectores escriben antológicas cartas atiborradas de odio, advierte bajo el título “Cuidado con el odio”: “El odio es un viento insidioso que envenena y fractura las sociedades. El odio K ha producido grietas. Amigos, colegas, instituciones y grupos lo han sufrido. La grieta ha alcanzado a familias, como la Darín. La sociedad está dividida.”
          Afortunadamente desde la izquierda llegan las recetas salvadoras: Hermes Binner elogia a Ghana como modelo de sociedad, porque allí, sostiene, rige la división de poderes. Victoria  Donda desde Libres del Sur, hace proselitismo hacia los sectores populares en las playas más aristocráticas de Mar del Plata, exhibiendo su bien dotado cuerpo en compañía de Alfonso Prat Gay, el hombre de las finanzas internacionales, ex funcionario del GP Morgan, proclamándose ambos de centro izquierda. No es de extrañar en un país donde el último ex presidente de facto de la autodenominada Revolución Argentina Alejandro Agustín Lanusse se atribuyó esa adscripción después de haber sido cómplice de la Masacre de Trelew. Entonces, ante su sorpresa, el Partido Comunista Revolucionario (PCR) lo etiquetó como pro-soviético.

Hoy este partido en el mes de enero sufre una fractura. Un sector ha decidido que ser revolucionario, propiciar la lucha de clases, pero ser aliado de la Sociedad Rural y de los pooles sojeros; haberse opuesto a la Resolución 125 y apoyar a los caceroleros, es una contradicción tan notable que violenta la lógica más elemental, sin necesidad de acudir a Marx, Engels, Mao o Trotsky. Los maestros del marxismo no tienen la responsabilidad de los que sosteniendo ser sus discípulos, usurpan y ensucian sus memorias. Marcelo Valko en su libro “ Los indios invisibles del Malón de la Paz” escribe que “Alfredo Palacios, el primer diputado socialista de América, saltaba de su banca del Congreso cada vez que Patrón Costa era criticado por “chupasangre” y salía en defensa del buen nombre y honor del ilustre magnate azucarero y político” (cita  a la revista Ahora del 3-08-1946). Recordemos que Patrón Costa fue “hacendado, ex senador y gobernador salteño, latifundista, gran industrial azucarero, socio de la Standard Oil, acusado de las más oscuras prácticas feudales”. El movimiento militar del 4 de junio de 1943 se realizó contra su candidatura que hubiera terminado en la presidencia gracias al fraude patriótico.

            El jefe político de Victoria Donda, el señor Humberto Tumini, que militó en el ERP, declaró a La Nación del 13 de enero: “Queremos constituir una nueva mayoría en la ciudad con Prat Gay, Donda, Gil Lavedra y Estenssoro.” Indudablemente, la revolución se ha extraviado y no se pagará recompensa por el rescate de quienes dicen que la escrituraron a su nombre.
            El calor de veranos cada vez más tórridos produce fantasías y espejismos. Hugo Moyano ha pasado a la política partidaria y decide sostener todo lo contrario de lo que afirmaba hasta hace un año. Su socio, el Momo Venegas, dirigente sindical de los peones rurales que es apoyado por las patronales campestres, sostuvo en La Nación del 15 de diciembre: “Tengo mucho para contar de la gran mujer que fue Isabel…….En la época de Isabelita estaban los Montoneros, había guerrilla, pero Isabel firmó el acta constitucional para eliminar la guerrilla. No es que nosotros dejamos que proliferara la guerrilla. Isabel firmó un acta para que se terminara, para que los guerrilleros depusieran sus armas a través de las Fuerzas Armadas. Hoy no tenemos Fuerzas Armadas, no hay policías, no tenemos nada. Hoy no tenemos guerrilleros, pero hay cosas peores. Si vos no podés salir a la calle, no podés retirar 10.000 pesos de un banco, creo que es peor…Vos hoy no sabés si te roban, si te han entregado; hoy nadie sabe nada…Vos te levantás un día y no sabés si va a estar la Presidenta, porque este es un gobierno que es un desgobierno.”
            Hasta el muy moderado ex Ministro de Economía de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner, Roberto Lavagna, quince meses después de las últimas elecciones, al mejor estilo apocalíptico de Elisa Carrió, sostuvo que “hubo niveles de fraude altísimos en las dos últimas elecciones.”
            Precisamente la diputada chaqueña que llegó a ser la principal figura de la oposición, hasta que sus desvaríos y pronósticos incumplidos la castigaron en las elecciones del 23 de octubre del 2011, sigue pelándose con la realidad y con su propia trayectoria, que en los últimos años discurre por los distintos medios del multimedios Clarín. Ahora sostiene que “Nunca hice política por los medios”
           Hasta el regreso de la Fragata Libertad es vivida por la oposición con desagrado, temerosa de celebrar un éxito, y sólo apuntan y se regodean con el posible error inicial del gobierno.   
            Es tiempo de verano. Un amplio repertorio de fuegos artificiales en donde el frío político se combate con declaraciones febriles y con calentamiento del dólar. Apenas una muestra de un amplio repertorio, que no incluye por razones de espacio la inexpresividad declarativa de Francisco de Narváez que se convierte en silencio profundo en el Congreso donde cobra un sueldo de diputado, algunas caídas en el cholulismo idiomático  de la presidenta, el castellano dificultoso de Mauricio Macri y sus declaraciones impúdicas, la obediencia verbal de Daniel Scioli y sus tenues gestos de diferenciación, las genuflexas afirmaciones de la diputada Diana Conti, las incertidumbres de romper o no con su partido del intendente de Tigre Sergio Massa.
El verano y los medios banalizan la política y la desprestigian con la complicidad de muchos políticos. Sería un buen momento para discutir el plan de transportes, la descentralización del mercado central por provincias y por barrios de las principales ciudades, una reforma impositiva integral, los pasos necesarios a concretar para superar el déficit energético, los borradores de una reforma impositiva integral, la continuación de lo iniciado hace un año acerca de los subsidios que lleguen discriminadamente  sólo a los que los necesiten. Apenas algunos temas de un menú amplio.
El gobierno, como siempre tomando la iniciativa y la oposición con propuestas alternativas y no meramente como comentarista crítico de los proyectos gubernamentales. 
Tiempo de verano. Que el agua llegue al tanque, para que no nos inunde la intrascendencia.



19-01-2013
Hugo Presman. Todos los derechos reservados. Para publicar citar fuente.

3 comentarios:

  1. señor hugo, lo felicito y le cuento q la politica esta hasta en la playa, el modelo de privatista y el q tiene mas y paga tiene arena y el q no se amontona.
    caminando por las grandes playas de mdq, uno ve balnearios privados por todos lados, con espacio para moverte. pero si pagaste pasajes caros , pagas un alquiler etc.. y no tenes para pagar una carpa te tendras q amontonar en la orillas con miles y miles q gastan mucho para ir a mdq y no te ofrecen nada de arena. te tenes q tomar un bondi para ir a una alejada playa del sur. pero estas si bien hay lugar tambien son privadas y se complica por donde te dejan pasar y por donde no.
    ahora digo yo fue el estado el q gasto millones y millones en el refulado q hicieron hace varios años, y fue el estado el q tiro piedra por piedra en esas escolleras q juntan arena.
    para q los empresarios privados pongas 2 pesos y se queden con todo
    saludo
    romu

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  2. Hugo,

    Felicitaciones. Excelente reflexión para estos tiempos.

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  3. sin duda es un verano raro en buenos aires. 3 días calor 1 lluvia 2 frío y asi constantemente.
    sin duda no va ser un año facil el 2013

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