A un mes de las elecciones del 28 de junio se podría ejemplificar el cuadro de situación con lo que se conoce como el examen de la bañera que consiste en lo siguiente: Durante una visita a un Instituto Psiquiátrico, uno de los visitantes le preguntó al Director, qué criterio se usaba para definir si un paciente debería o no ser internado. Bueno, dijo el Director, “hacemos la prueba siguiente: llenamos completamente una bañera, luego le ofrecemos al paciente una cucharita, una taza y un balde y le pedimos que vacíe la bañera. De la forma como vacíe la bañera, sabemos si hay que internarlo o no”.
“Ah, entiendo” dijo el visitante. “Una persona normal usaría el balde porque es más grande que la cucharita y la taza”. No dijo el director. Una persona normal sacaría el tapón. Usted que prefiere, ¿una habitación con o sin vista al jardín?
El poder económico, lo único que en el lenguaje del sociólogo Zygmunt Bauman es sólido, quiere sacar el tapón de la bañera y que se escurra el agua que en el ejemplo es el gobierno. Ese poder económico está representado por
A los partidos políticos opositores que intentan representar con sus matices a dicho poder, les conviene sacar el agua, algunos con cucharita, otros con tazas y las más impacientes con balde, pero a ninguno le favorece políticamente extraer el tapón de la bañera. Necesitan acomodar fuerzas para el 2011. En cambio el poder económico está impaciente. Parece una remake de APEGE ( Asociación Permanente de Entidades Gremiales Empresarias) una entidad enpresaria coyuntural, en términos societarios una UTE ( Unión Transitoria de Empresas), que se constituyó en agosto de 1975, realizó un lock-out patronal en febrero de 1976, alentó y propició el golpe, y en 1977 se disolvió.
El gobierno, que en el ejemplo es el agua, debe evitar que se diluyan sus propias fuerzas reducidas fundamentalmente a
Si el poder económico concentrado es sólido, todas las expresiones políticas son líquidas.
La contradicción entre las intenciones del poder económico y los deseos de las representaciones políticas opositoras se refleja en la alegría del simiesco presidente de
EL TEDEÚM DE
La inauguración de la 123 Exposición de
El desmesurado lenguaje, el tono intimidatorio, el pliego de condiciones que le presentan al gobierno es posible que termine creando anticuerpos en la sociedad y produciendo fracturas en esa vereda política. Es una reiteración, con otras propuestas, del ultimátum que el directivo de
Han llegado a decir ahora: “Si
El poder económico se expresa en forma clara a través del periodismo en general y de los columnistas de
El rostro de la oposición es espantoso pero eso no debe disminuir ni ocultar los notables errores del gobierno. Como dijo un peronista descabalgado: “ Un catálogo de caprichos no constituyen un programa revolucionario”. La ganadería y los tambos son actividades que no pueden desaparecer o reducirlas a marginales, dejando al mercado el vuelco a la actividad más rentable que es la soja.
Es necio ignorar que la estructura agropecuaria se ha modificado. Que la tecnología que ha ido contra la feracidad futura de los suelos y entrando en conflicto con la salud de la población, ha incrementado notablemente la productividad. Que hay muchos hijos de chacareros que vuelven al campo después de haber pasado por
También queda claro ahora, lo que sostuvimos algunos durante el largo conflicto del gobierno con las patronales agropecuarias. Surgió como una disputa por las retenciones pero derivó en una lucha por el poder y la distribución de la renta. A más de un año de esos hechos, lo reconoce Clarín a través de su columnista Ricardo Kirschbaum el 29 de julio: “ Parieron un resultado en el que las reivindicaciones sectoriales ya se han transformado en planteos políticos que van mucho más allá de una larga batalla por las retenciones….Las entidades rurales se han asumido…fiscales de oficialistas y opositores, siempre que estos no subordinen su estrategia a sus planes y a sus necesidades” .
EL NEUROPSIQUIÁTRICO Y “ El grito de Figueroa Alcorta”
La derrota electoral ha consumado una crisis política de envergadura que acrecienta una crisis económica en desarrollo en la que se mezclan causas internas e internacionales. La fuga de capitales es enorme y hasta ahora es contrarrestada por el superávit comercial, de cuenta corriente, y la buena recaudación impositiva. Pero la crisis internacional afecta a las dos primeras y la creciente recesión interna corroe la recaudación. En ese marco, la dispersión creciente de las fuerzas del gobierno complica considerablemente el margen de maniobra de Cristina Fernández.
A diferencia del examen de la bañera, aquí la racionalidad es no sacar el tapón. Con el agua gubernamental se irían las convenciones colectivas, la recuperación de la legislación laboral, la política de derechos humanos, el alineamiento latinoamericano actual, la mayor presencia del Estado, las estatizaciones, el respeto a las protestas sociales en el espacio público, la mejor distribución del ingreso de los trabajadores formalizados, entre otros avances significativos.
Cuando se observan las limitaciones del gobierno, sus burdos errores, incluso su falta de transparencia, es conveniente mirar lo que implica una oposición que atrasa décadas. El diputado Jorge Rivas, tetrapléjico, capaz de mover sólo un dedo, privado de la voz, mantiene una lucidez y un poder de síntesis admirable. Preguntado sobre qué le gusta del kirchnerismo respondió: “Los enemigos que tiene”
El modelo modificado de los noventa tiene un límite y posiblemente ha llegado a su frontera. Hacia atrás está el pasado. Hacia adelante está abordar una política agropecuaria, minera, petrolera e industrial superadora, con una batalla integral contra la pobreza e indigencia. Es fácil apreciar que lo que queda para avanzar es desproporcionado a las fuerzas con que hoy se cuenta y a los límites evidentes del kirchnerismo.
Tan claro como saber, que una vez vaciada la bañera, no llega Pino Solanas. Están los candidatos del Poder Económico destituyente. Y el progresismo que en su afán de diferenciarse desde la vereda de enfrente, termina siendo funcional a los Biolcati y sus socios.
Volver al pasado y alegrarse por una remake del Primer Centenario, es ingresar en el Neurosiquiátrico, donde deben ser internados, en todo caso, los que quieran levantar el tapón. Por el agujero de la bañera agropecuaria se van veinte millones de argentinos. En el modelo pastoril sobra gente, el país termina siendo un campo de soja. Del granero del mundo del Primer Centenario a un exportador de forrajes cien años después. Un camino con un destino definitivo de colonia. De ser así, San Martín vuelve a morir y hasta sus cenizas desaparecen de
29-07-2009
Publicado por Hugo Presman.
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