30 julio 2009

CLIMA DE ÉPOCA

Muchas veces he afirmado que los procesos históricos no pueden ser analizados a través de la mirilla de la corrupción. Que si ese es el parámetro para analizar las grandes bisagras de la humanidad, desde la Independencia Norteamericana a la Revolución Rusa, desde la Revolución Francesa a la Cubana, desde la gesta de los héroes que lucharon por la Independencia de España en el marco de constituir una confederación de Estados al sur del Río Bravo a la Larga Marcha de Mao, desde el triunfo de la Revolución Industrial a la Caída del Muro de Berlín, todo se enaniza, adquiere la dimensión de bonsái y reproduce aquél viejo ejemplo atribuido a los chinos de que cuando alguien señala con el dedo a la luna, el corto de miras sólo aprecia el dedo y no ve a la luna. El periodista Martín Caparrós ha definido este fenómeno como “honestísmo”, cuyo exponente más paradigmático en la Argentina es la Doctora Elisa Carrió. Ha llegado a sostener la dirigente de la Coalición Cívica que no importa la ideología sino que lo determinante es la honestidad de los protagonistas. Inmediatamente el interlocutor que escucha el razonamiento crítico al “honestismo”, reacciona preguntando si uno apaña a la corrupción. Y tal vez lo que no entiende es que la corrupción tiene y debe ser denunciada sin erigirla en la columna vertebral del análisis político. De alguna forma ese fue la falacia levantada por la Alianza, que se proponía en última instancia ser el menemismo en su versión honesta. Y el problema fundamental no era la corrupción del menemismo sino las políticas de entrega de la segunda década infame. Sin un peso de corrupción, el menemismo hubiera sido igualmente devastador. Aunque eso de alguna forma es un oxímoron: la corrupción fue la vaselina que facilitaba y potenciaba la entrega.
Martín Caparrós escribió en Crítica de la Argentina: “ El honestismo es esa “idea tan difundida según la cual –casi– todos los males de la Argentina contemporánea son producto de la corrupción en general y de la corrupción de los políticos en particular……. eso, en política, no alcanza para nada: que un político sea honesto no define en absoluto su línea política. Por eso digo que la honestidad es –o debería ser– un dato menor: el mínimo común denominador a partir del cual hay que empezar a preguntarse qué política propone y aplica cada cual.”

DECÍAMOS AYER
Allá, por agosto del 2007, en una nota titulada “Acerca de la Corrupción” decía: “Nos vendieron una historia falsa. Sabiendo que con eso condicionaban el futuro. George Orwell en “1984” sostiene: “Quién controla el pasado controla el futuro; quien controla el presente controla el pasado” Hay que tener en cuenta que la historia es la política del pasado, como la política es la historia del presente. No entender como fue la política en el pasado es haber quedado sin brújula para analizar el presente.
Además de su adulteración profunda nos presentan una serie de héroes impolutos nacidos con vocación de bronce. Son tan puros, tan colmados de virtudes que ningún ser humano puede identificarse con ellos. Cualquier comparación con esos personajes ahistóricos resulta una derrota cantada. Es como el autor malhadado de esa frase nefasta sobre Carlos Gardel: “Cada día canta mejor”. De alguna forma es el fin de la historia, porque nunca podrán surgir protagonistas que lo superen.
Lo que esa historia evita, entre otras cosas, comprender que ni San Martín ni Bolívar, para citar dos figuras emblemáticas eran considerados héroes por sus contemporáneos. San Martín no pudo regresar a tiempo a Buenos Aires para asistir a su mujer Remedios que se moría de tisis porque el riesgo de ser asesinado en la ciudad puerto.(1) Bolívar abandona Bogotá custodiado por sus amigos ante el peligro que atentaran contra su vida mientras en las paredes aparecen leyendas de “ Bolívar: traidor” (2)
El conocimiento de la historia real con sus conflictos y pasiones, permite analizar el presente en perspectiva. Sabiendo que el tiempo depura lo secundario, disminuye la significación de ciertos hechos y ubica lo importante en su justa medida…..George Washington, primer presidente de EE.UU, desempeñaba su cargo de general de ejército norteamericano ad – honorem. Pero era el proveedor de ese ejército lo que le proporcionaba utilidades suculentas que pretendía disimular con su cargo no rentado.
A José de San Martín se le imputa el cobro de una comisión en la compra de barcos para el traslado de las tropas de Chile a Perú. Un historiador liberal dice: “Desde Santiago, O¨Higgins le hizo saber que la importante suma de dinero que habían mandado a Londres hacía seis años con Álvarez Condarco ( cuando fue a comprar barcos para la campaña) para que la depositaran a nombre de ambos, éste la había dilapidado haciendo apuestas en la bolsa. “Nos quedan solamente doce mil quinientos pesos para cada uno- se lamentaba Bernardo en lenguaje cifrado- y el importe suyo lo dejo en manos de Felipe del Solar” “DON JOSÉ LA VIDA DE SAN MARTÍN” José Ignacio García Hamilton Editorial Sudamericana Junio del 2000 Página 259
A José Beer Gelbard se le probó una comisión, como demuestra María Seoane, en su biografía favorable al primer Ministro de Economía del tercer gobierno de Perón….. A Juan Domingo Perón se le imputa haber cobrado un dinero por el pacto con Frondizi: “Para su llegada al gobierno (Arturo Frondizi) se dijo que incluso compró sus apoyos. Según Jorge Antonio (amigo y mecenas de Juan Perón), éste recibió 85.000 dólares de Rogelio Frigerio, el asesor directo de Frondizi, para que promueva su candidatura en 1958” Negocios, corrupciones y política” Guillermo Vitelli citando revista Tres Puntos del 29 de enero del 2003.
No faltará quién juzgue a Washington en su calidad de proveedor, quién cuestione a San Martín por esa comisión, a Gelbard por la coima o a Perón por el dinero cobrado por un pacto. Quién tenga una visión tan microscópica y miope de la historia, una apreciación delineada a través de una calificación moral, podrá encaminarse a un juicio “políticamente correcto”, pero quedará lejos de entender los procesos históricos que estas figuras protagonizaron.
Dando por cierto los hechos mencionados a los efectos de esta nota, no podría elogiarse las actitudes de Washington, San Martín, O¨ Higgins, Perón y Gelbard. Pero al mismo tiempo sería estúpido negar el papel de Washington en la Independencia Norteamericana, el papel excepcional de San Martín y O¨Higgins en la Independencia americana, la concepción continental, principalmente del nacido en Yapeyu, su envergadura histórica. Lo mismo sucedería con las notables presidencias transformadoras de Perón o la visión de un país integrado, en un empresario con un proyecto nacional como Gelbard.
Cuando se llega a este punto, el políticamente correcto preguntará incisivo: Entonces ¿Ud cree que el fin justifica los medios? o acaso se adscribe a aquello que “roba pero hace”.
Y la respuesta es no. Simplemente que el hecho criticable se lo contextualiza en el balance general del protagonista. No merecerá elogios por la agachada, pero la agachada debe analizarse en el recorrido general del protagonista……. Como se ve no resulta sencillo realizar un análisis lineal acerca de la corrupción. Además, si el interlocutor se sube a un banquito y desde ahí derrama un discurso políticamente correcto, confundiendo la complejidad histórica con juicios morales, la historia deja de ser un lugar de aprendizaje para ser una extensa sucesión de de repeticiones de Sodoma y Gomorra.
Llegado a este punto, se deduce que para el criterio de la doctora Elisa Carrió, en su Coalición Cívica, no tendrían cabida, más allá de las diferencias ideológicas, solamente por razones morales, San Martín, O¨Higgins, Washington, de ser argentino, Perón y Gelbard. Eso sí: el neoliberal Ricardo López Murphy, el conservador Gustavo Gutiérrez están en la coalición cívica por méritos propios. No son ni Perón ni Washington. Pero son irreprochablemente honestos para la ex jefa del ARI, para quién San Martín sería aquel que se quedó con el dinero de la flota.

RECUERDOS DE LOS SESENTA Y LOS SETENTA
Fui militante político en la segunda mitad de la década del sesenta y en los setenta. No me lo comentaron. Estuve ahí. Además lo he chequeado con muchos de aquellos protagonistas y testigos Por eso puedo asegurar que cuando alguien ingresa a la política lo hace en la mayoría de los casos para tratar de concretar sus ideas y sus sueños y no para enriquecerse. Hacia 1969, no había en la opinión pública la idea que Onganía desde la derecha o Santucho desde la izquierda, para dar dos ejemplos extremos, uno tomaba el poder por asalto y el otro lo buscaba por la vía armada, tenían como finalidad el enriquecimiento personal. Es cierto que Onganía implicaba la adopción de políticas que permitían el enriquecimiento de sectores económicos concentrados y el empobrecimiento de los populares. Cuando su Ministro de Economía, Adalbert Krieger Vasena, dejó su cargo y pasó a formar parte del directorio de la empresa extranjera DELTEC S.A, la reacción de rechazo fue muy fuerte.
La idea de la mayor parte de la militancia política era el desprecio o la subestimación hacia los cargos públicos, porque el objetivo era hacer la revolución.

LA DEMOCRACIA Y LA CORRUPCIÓN
El acceso a un régimen periódico de elecciones se realizó después de padecer los años de plomo y una derrota bélica. La sociedad que emergió asumió en muchas de sus franjas una épica individualista y en sus extremos el “sálvese quién pueda”. No había un proyecto colectivo abarcador y entonces el militante fue sustituido por el operador rentado, el pueblo por la gente, y las luchas obreras empezaron a ser analizadas desde el ángulo del usuario, al que la prédica ideológica predominante lo catalogaba de víctima y rehén.
En ese contexto, muchos representantes políticos, abdicaron el intento colectivo de cambiar la sociedad por el individual de cambiar de clase social. La Coordinadora radical tuvo algunos representantes que se adecuaron a los nuevos tiempos, prolongados en algunos epígonos de la renovación peronista y encontraría su cumbre en la década menemista. Cierto clima de época quedó reflejado en la brutal definición que acuñó el empresario Alfredo Yabran con la frase “El poder es impunidad”
Cuando el modelo de rentabilidad financiera estalló en el 2001, sectores amplios de la ciudadanía tradujeron en la consigna antipolítica del “ que se vayan todos” la desilusión de que el pasaje que le habían vendido al Primer Mundo era trucho, con el contraste de constatar su declinación económica con la ostentación pornográfica de muchos de sus representantes.
El mensaje de cambio expresado en las calles, el repudio a todo lo que olía a político fue recogido con timidez por Eduardo Duhalde y con entusiasmo por Néstor Kirchner. Los políticos recuperaron parte del prestigio perdido, pero muchas señales del “clima de época” perduraron, se refugiaron en islotes de corrupción más o menos encubiertas y cada tanto asoma con grados de impudicia llamativa.
La dictadura establishment-militar y luego el menemismo han dejado cicatrices profundas. Es significativo lo que dice la profesora de Literatura Eugenia Almeida autora de la novela “El Colectivo”: “Las marcas de la dictadura en los alumnos del secundario es la imposibilidad de pensar colectivamente. Aún con buenas intenciones, no surge un pensamiento colectivo, que es más difícil pero más rico y apasionante. También la dificultad para escuchar, cualquiera sea el que hable….Es muy fuerte llegar a una aula y encontrar que los chicos se resisten a poner en cuestión cosas, tienen una mentalidad “esto es así” y no se piensa. Entonces la única convicción que puedo intentar transmitirles es que las cosas no siempre son lo que parecen, que el mundo es más complejo, que percibimos lo que esperamos ver y hay que tener cuidado con eso ”

LAS MANIFESTACIONES DE BIENES DE NÉSTOR Y CRISTINA KIRCHNER
Desde el punto de vista de la militancia setentista, siempre se le recriminó a los Kirchner el haber construido su fortuna inicial sobre los dolores de la circular 1050. Sorprendentemente también fue usado el argumento por quienes construyen sus riquezas por métodos iguales o peores, que constituyen en última instancia el sustrato último del sistema que queda reflejada en la expresión demoledora de Carlos Marx “el capitalismo llega chorreando sangre y lodo”. Más allá de ciertas dificultades para justificar claramente incrementos de patrimonio lo que puede apuntarse especialmente en las dos últimas declaraciones juradas es la desprolijidad de quien las confeccionó al valuar las acciones en la Sociedad Hotesur S.A, teniendo ambos cónyuges la misma proporción, las mismas valen para Cristina Fernández $ 371.232 y para Néstor Kirchner la suma de $ 1.941.632.
El segundo punto injustificable es la compra de terrenos fiscales en Calafate a precios significativamente inferiores a los de mercado, que en una primera justificación era para facilitar el desarrollo urbano del lugar. Uno de esos terrenos fue vendido a la firma Cencosud S.A, sin ninguna construcción, y en apenas dos años en un precio 47 veces mayor. Esta operación figura en la Manifestación de Bienes del 2008.
Otro detalle cuestionable, este desde el punto de vista ético, es que buena parte de los voluminosos plazos Fijos están en dólares, lo que resulta tan incongruente como cuando los Ministros de Educación envían a sus hijos a escuelas privadas. Lo que resulta chocante, típico del “clima de época” y absolutamente incompatible es que en pleno ejercicio de la presidencia de Cristina Fernández, la familia haya constituido una sociedad anónima llamada EL CHATEL, integrada por Néstor, Cristina y Máximo Kirchner como presidente, dedicada “al estudio, a la investigación y al asesoramiento en las ramas de la economía, finanzas, derecho, ciencias sociales, educación, administración y otras disciplinas de personas físicas o jurídicas del país o del extranjero; comprendiendo la elaboración de estudios de mercado, factibilidad, planes de inversión y programas de desarrollo, la realización de proyectos de comercio interior o exterior y la elaboración de informes, y proyectos, de crecimiento, de infraestructura y de temas relacionados con la actividad agropecuaria o inmobiliaria.” La sociedad fue constituida por escritura pública 1193 del 21 de diciembre del 2007.
Otro detalle llamativo es que la rentabilidad en dólares de los plazos fijos supera largamente lo que se paga en el país y en el exterior.

CLIMA DE ÉPOCA I
Exteriorizaciones típica de la supervivencia de un “clima de época” han sido las declaraciones del Presidente del ANSES, Diego Bossio, un joven de 29 años quien debe ser controlado por la Sindicatura en la que figuraba como número dos, su mujer, Valeria Loria. Demostrando que no es condición necesaria ni suficiente ser joven y nuevo en política para desterrar viejas prácticas, con notable desparpajo declaró: “ Mi mujer me controla muy bien” Cuarenta y ocho horas más tarde Valeria Loria renunció. No se puede entender cuál fue la razón de pagar gratuitamente ese costo político.
De la misma forma, siempre fue un ejercicio de prestidigitación el itinerario y destino de los Fondos de Santa Cruz. Algo tan sencillo como las distintas colocaciones y los intereses devengados, elemental en toda rendición de cuentas se convirtió en un misterio más complejo que la teoría de la relatividad. Un ejercicio de prestidigitación pero con el defecto que al mago se le detectan los trucos.

CLIMA DE ÉPOCA II
La Argentina ha tenido a lo largo de su historia sólo 52 presidentes, de los cuales 13 fueron de facto. Excluyendo a Néstor Kirchner y Cristina Fernández, los presidentes elegidos fueron 37. A lo largo de las sucesivas generaciones, es posible que el número de argentinos alcancen una cifra de trescientos o cuatrocientos millones. Néstor y Cristina comparten el espacio de los elegidos con solo 37 argentinos. Es un círculo ultra restringido y es la cima máxima que puede alcanzar todo el que se inicia en política con su bagaje de ideales. Por eso resulta difícil de entender que alcanzado ese sitial se perpetren hechos confusos, situaciones muy reprochables o integrar sociedades incompatibles con los puestos alcanzados. Sobre todo cuando uno afirma: “ No dejaré mis ideales en la puerta de la Casa de Gobierno”
Pero para no confundir aserrín con pan rallado, es bueno recordar una aseveración del economista Carlos Leyba: “ No es lo mismo que haya corrupción en un gobierno a que gobierne la corrupción. A mí no me importa que Menem se haya llevado dos pesos, lo que me importa es que entregó el petróleo”
Desde una perspectiva histórica la valuación del kirchnerismo tendrá otros parámetros de análisis. Si el balance político, económico y social arroja un saldo favorable, las oscuridades serán una nota al pie. Si el resultado es negativo, las irregularidades formarán parte del cuerpo principal.
(1) “Partió rumbo a Chile donde permaneció hasta enero de 1823 cuando se trasladó a Mendoza. Desde allí pidió autorización para entrar en Buenos Aires y poder ver a su mujer que estaba gravemente enferma. Cuenta su compañero del Ejército de los Andes Manuel de Olazábal que al enterarse que su querido jefe partía hacia Buenos Aires decidió salir a su encuentro y acompañarlo. San Martín conocía perfectamente los efectos que había producido entre la clase dirigente porteña su negativa a participar en la represión interna. Unos años antes Zañartú ya le había advertido a O¨Higgins: “Todos abominan de San Martín y no ven en él más que un enemigo de la sociedad desde que se ha resistido a tomar parte en las guerras civiles y ha impedido la marcha de sus tropas. A él le atribuyen la sublevación de los pueblos y si aumentan las desgracias de este país, creo que le quemarán en estatua” 5-02-1820
Rivadavia, ministro de gobierno del gobernador Martín Rodríguez, uno de los principales enemigos de San Martín, le negó el permiso, argumentando que no estaban dadas las condiciones de seguridad para que entrase en la ciudad. En realidad Rivadavia, que siempre le había negado cualquier tipo de ayuda a San Martín, temía que el general entrase en contacto con los federales del Litoral y, con su prestigio, diera un vuelco absoluto a la política local. El gobernador de Santa Fe, Estanislao López, le envió una carta advirtiéndole que el gobierno de Buenos Aires esperaba la llegada del general para someterlo a un juicio por haber desobedecido las órdenes de reprimir a los federales y le ofrece marchar con sus tropas sobre Buenos Aires si se llegara a producir tan absurdo e injusto juicio……San Martín le agradeció a López su advertencia y declinó su ofrecimiento para evitar “ más derramamientos de sangre”. Ante el agravamiento de la salud de Remedios, y pese a las amenazas, San Martín decidió viajar igual a Buenos Aires, pero lamentablemente llegó tarde, su esposa ya había muerto, sin que él pudiera compartir al menos sus últimos momentos” “Los mitos de la historia argentina” Tomo II de Felipe Pigna Página 56 y 57 Editorial Planeta
(2) “Bolívar se encontraba cerca de Cartagena cuando recibió la noticia del asesinato de Sucre, que lo anonadó y precipitó su muerte. Se disponía a viajar a Europa, aunque ya carecía de recursos, pues había regalado su quinta, empeñado su vajilla de plata y distribuido sus últimos dineros entre la multitud de oficiales, soldados y partidarios que huían de Bogotá hostil. Aquel mantuano que al iniciarse la revolución tenía mil esclavos, los había liberado a todos. Ahora, los propietarios de esclavos que el rehusó expropiar, lo echaban de la patria. Solo esperaba un barco para alejarse de la tierra de sus hazañas. Sintiéndose agravado su mal, llegó hasta Santa Marta. Allí los médicos comprobaron que sus días estaban por concluir. Sus partidarios lo llamaban para encabezar de nuevo la República, envuelta en el caos. Páez, el “primer lancero del mundo”, gobernaba en Venezuela y no estaba dispuesto a entrar en negociaciones con Nueva Granada “hasta que Bolívar hubiera evacuado el territorio de Colombia………Murió el 17 de diciembre de 1830 en Santa Marta, en cama ajena, médico gratuito, sin un centavo y con la Gran Colombia dividida en cinco Estados. El separatista Santander escribió: “El tiempo nos dirá si su muerte ha sido o no útil a la paz y a la libertad. Para mí tengo que ha sido no sólo útil sino necesaria” Historia de la Nación Latinoamericana” Jorge Abelardo Ramos Páginas 320 y 321 Peña Lillo Editor 1968
A su vez la maestría de Gabriel García Márquez recrea las horas finales de Bolívar en Bogotá, en su novela “El general en su laberinto” Escribió: “Él abrió sus ojos, menos inquieto que intrigado, y ella cerró el libro en el regazo, marcando la página con el pulgar.
“Son sus amigos “, le dijo.
“ No tengo amigos”, dijo él. “Y si acaso me quedan algunos ha de ser por poco tiempo”
“ Pues están ahí afuera, velando para que no lo maten” dijo ella ( Manuela Sáenz, su compañera)
Fue así como el general se enteró de lo que toda la ciudad sabía: no uno sino varios atentados se estaban fraguando contra él, y sus últimos partidarios aguardaban en la casa para tratar de impedirlos. El zaguán y los corredores en torno del jardín interior estaban tomados por los húsares y granaderos, todos venezolanos, que iban a acompañarlo hasta el puerto de Cartagena de Indias, donde debía abordar un velero para Europa”.

Publicado por Hugo Presman.
24-07-2009
Todos los derechos reservados. Hugo Presman. Para publicar citar la fuente.

22 julio 2009

CLARA ANAHÏ

Chicha se mira en el espejo. La imagen que observa es la de una mujer que aparenta tener menos de los 85 años que transporta su cuerpo. De esas ocho décadas y un lustro, 32 años los dedicó obsesivamente a encontrar a su nieta. A Clara Anahí. Sabe que el tiempo corre en su contra. Muchas veces afirmó: “Caeré muerta en la búsqueda de mi nieta”. Hace poco, en junio del 2008, murió Alicia (Licha) de la Cuadra con quien fundaron “Abuelas con Nietitos Desaparecidos” que luego se llamó mundialmente Abuelas de Plaza de Mayo. La vida será mucho más injusta aún si le toca la misma suerte de Licha que murió sin poder abrazar a su nieta nacida en cautiverio. Licha tenía 92 años y desaparecidos a su hijo Roberto, obrero de YPF y a su hija Elena, embarazada de cinco meses. Por si fuera poco, también está desaparecido el marido de Elena, Héctor Baratti, obrero metalúrgico y dirigente del Partido Comunista Marxista- Leninista. Sabía que la hija de Alicia había tenido una nena a la cual le puso el nombre de Ana Libertad. ¡Que paradoja! piensa Chicha Mariani, que su madre prisionera y condenada a la desaparición le diera a su hija el nombre de Libertad. Vuelve a mirarse en el espejo. ¿ Como será mi nieta hoy? se pregunta. Sabe que ya tiene 32 años. Y se la imagina: “Seguramente con hijos, tan inteligente como eran sus padres y con la sensibilidad de ambas familias de origen. Me la imagino toda melenuda como cuando era bebé y alegre a pesar de todo lo que pueda haber pasado”

Recuerda que el frío atravesaba la noche de invierno del último día de agosto del 2008. Hace menos de un año le escribió una carta a su nieta. Una botella al mar de la impunidad. Con la remota esperanza que encuentre a su destinatario. Siente deseos de volver a leerla. La busca. Es un papel observado infinidad de veces. Sobre el cual cayó más de una lágrima Que en forma de correo electrónico, manos amigas, han hecho circular infinidad de veces por Internet. La sabe de memoria, pero la vuelve a leer:

Querida nieta: Soy tu abuela "Chicha" Chorobik de Mariani, te busco desde el momento en que Etchecolatz, Camps y su tropa mataron a tu madre y te secuestraron de tu hogar en la calle 30 nº 1134 de La Plata, República Argentina. Era el 24 de Noviembre de 1976 y tenías 3 meses de edad. Desde ese momento con tu padre te buscamos hasta que a él también lo asesinaron.

A pesar de que trataron de convencerme de que habías muerto en la balacera, yo sabía que estabas viva. Hoy está comprobado que sobreviviste y estás en poder de alguien. Ya tienes 31 años y tu número de documento probablemente sea cercano al 25.476.305 con el que te anotamos. Yo quisiera pedirte que busques fotos de cuando eras bebé y las compares con las que acompañan este texto.

Quiero contarte que tu abuelo paterno se dedicó a la música y yo a las artes plásticas; que tus abuelos maternos se dedicaron a las ciencias, que tu mamá amaba la literatura y tu papá era licenciado en economía. Ambos tenían un gran sentido de la solidaridad y compromiso con la sociedad. Algo de todo esto tendrás en tus inclinaciones de vida porque, a pesar de que hayas sido criada en un hogar distinto, uno guarda internamente los genes de sus antepasados. Seguramente hay muchas preguntas sin respuesta que aletean en tu interior.

A mis más de 80 años mi aspiración es abrazarte y reconocerme en tu mirada, me gustaría que vinieras hacía mí para que esta larga búsqueda se concretara en el mayor anhelo que me mantiene en pie, el que nos encontremos.

Clara Anahí, mientras te espero seguiré buscándote.

Te abraza tu abuela "Chicha Mariani"


Hace 32 años

Chicha Mariani sabe que aquel día de noviembre de 1976, su vida cambió para siempre: “Estaba en mi casa de calle 44 y 21 esperando a Diana que me iba a traer a la beba para que la cuide, como hacía todos los miércoles y sábados, y me di cuenta del paso de tanques, helicópteros, patrulleros y efectivos, y tuve miedo por mi nuera. Yo no sabía nada de política en aquella época, pero sabía que estaban matando a muchos jóvenes. Me inquietó pensar que Diana iba a tener inconvenientes para llegar y fui a la casa de una amiga. Iba y venía, tejiendo una manta para Clara Anahí, mientras esperaba. Ese tejido está aun hoy en el punto en que lo dejé. Luego recibí un llamado de mi madre, que me avisaba que mi padre estaba enfermo, de modo que me fui a City Bell para estar con ellos. -Al regresar vi un tumulto de gente frente a mi casa, muchos lloraban. Los vecinos creían que estaba muerta dentro de la casa, porque había habido un tiroteo. Al ingresar encontré todo destrozado y medio metro de todas las cosas rotas, vidrios, cubiertos, ropa, aceite, café, lo que fuera que hubieran encontrado en la casa estaba roto y tirado, salvo lo que habían robado. Comencé a buscar los cadáveres. Con este objetivo me dirigí a la comisaría 5º. Allí un oficial me confirmó que mi hijo y mi nuera estaban muertos, pero que no podían entregarme los cuerpos. Asimismo, el policía me dijo que no habían encontrado ninguna beba. Con el correr de los días pude enterarme que mi hijo seguía vivo, porque él me llamaba periódicamente por teléfono. Daniel se había salvado porque quince minutos antes del ataque a su casa, viajó a Buenos Aires, donde trabajaba. La búsqueda de Clara Anahí se inició a través de un matrimonio, compuesto por Omar Cerutti y Elvira Molina, conocidos de mi esposo. La familia Cerruti se acercó a mí cuando pasó ese atroz desastre de la casa de mi hijo. Elvira me convocó a su casa y me contó que la familia se reunía con su sobrina Elena Núñez –quien también declaró en el Juicio a las Juntas y confirmó el dato de que Clara Anahí salió con vida– y con su novio, un agente recién ingresado a la Policía. Era nada más y nada menos que Daniel del Arco. En mi desesperación ofrecí todos mis bienes a cambio de la entrega de la niña, siempre por medio de la familia Cerruti-Molina. Para mayor seguridad consulté al cónsul de Italia en La Plata, Luiggi Di Vita, quien me ofreció cuidar a mis padres y sacarme en un auto de la embajada. Yo pensaba que el cielo se abría para mí. Pero el plan se abortó porque el cónsul fue a ver al jefe de Policía, el coronel Ramón Camps. Al día siguiente, Di Vita me “reprochó” que había “mentido”. Camps le dijo que mi hijo había muerto hacía un mes, y que quería chantajearlo para que Montoneros se

quedara con el dinero.”


La casa de la calle 30

Hoy es un museo. La Casa Museo Mariani – Teruggi, que fue declarada monumento histórico. En una crónica de Página 12 del 15-08-2008 se lee: “La casa de la Calle 30 de La Plata habla. Desde el revoque blanco del frente hasta el muro del fondo del terreno, su arquitectura detalla a través de cientos de impactos de bala la crónica del 24 de noviembre de 1976, en el que 150 uniformados al mando del represor Ramón Camps arrasaron la vivienda en la que vivían Diana Teruggi y Daniel Mariani junto a su hija Clara Anahí, quien con apenas tres meses de edad logró sobrevivir al operativo. Sólo que lo hizo en los brazos del efectivo que la secuestró entre el humo de la balacera, y aún permanece desaparecida…… Prácticamente no hay rincón de la vivienda que no haya sido alcanzado por las balas de los hombres de Camps que buscaban destruir la imprenta clandestina que funcionaba en el fondo. La fachada parece una postal detenida en el tiempo. Allí están las marcas de los proyectiles de FAL en el portón gris del garaje, que pueden verse desde la vereda de enfrente. En el centro de la pared que daba al dormitorio de Clara Anahí, en el lugar que alguna vez ocupó una ventana con postigos, sólo queda el hueco que dejó el disparo de una tanqueta, que atravesó ese cuarto y el comedor y pegó contra uno de los muros del baño.
Aquel noviembre famoso de La Plata, la tropa represiva apoyada por dos helicópteros bombardeó el domicilio durante más de tres horas luego del mediodía. “Cuando terminó todo, todavía estaban servidas las milanesas del almuerzo en el comedor”, recordó ayer un vecino, que tenía menos de diez años cuando ingresó a la vivienda después del tiroteo.
En el operativo, Diana fue barrida por una ráfaga, igual que otros tres compañeros. Daniel, que no estaba en el lugar en ese momento, fue asesinado por fuerzas represivas ocho meses después, en una esquina platense. Y según varios testimonios, Anahí no fue alcanzada por el tiroteo gracias al reparo que le brindó una bañera vacía en la que fue depositada antes del ataque.”


La casa de los conejos

Laura Alcoba, hoy una talentosa escritora radicada en Francia y en 1976 una niña que con su madre vivieron en la casa de la calle 30 de La Plata cuenta en el libro que tiene por título el de este capítulo: “ Mi madre y yo nos presentamos en una nueva casa donde conocemos a una joven pareja: sus nombres son Daniel y Diana, pero los llaman “Cacho” y Didí”. Diana está embarazada, pero casi ni se nota. Tiene el pelo largo, claro y ondulado, y grandes ojos verdes, extremadamente luminosos y dulces. Es muy hermosa, e increíblemente sonriente…..Mi madre me dice que muy pronto viviremos con Cacho y Didí en otra casa, lejos del centro de la ciudad. ……Por fin nos mudamos a la casa de Cacho y Didí …..Al frente de la casa hay una verja, oxidada por parte, que separa un patiecito ínfimo de una vereda que apenas si merece el nombre, llena como está de piedras, arena, baldosas y montículos de tierra……..Después de franquear la puerta, uno entra en un corredor. A la derecha, el cuarto de Cacho y Didí se abre a este corredor. A la izquierda, una puerta permite acceder a un garaje. Son las dos únicas piezas que dan a la calle. Al final del pasillo hay una cocina relativamente grande, que sirve también de sala y comedor diario. Pasando esta habitación casi para todo uso, el corredor termina en otra puerta que da al patio del fondo. Abriéndose también directamente sobre el patio, hay un baño sin ventanas y bastante vetusto. Frente a la puerta de la cocina, otra puerta se abre sobre una habitación minúscula en la que dormimos mi madre y yo. Al fondo del pasillo y detrás de la pieza que nosotros compartimos, se encuentra un tinglado rudimentario, una suerte de cobertizo descalabrado que, contrariamente a lo que pensaría cualquier extraño al grupo, es el verdadero corazón de la casa. Fue por la existencia de este galpón en pésimo estado, apenas cubierto con algunas chapas de zinc acanaladas que, malamente, hacen las veces de techo; fue por este galpón que la conducción de Montoneros ha elegido la casa. Y que vivamos en ella” Bajo una fachada de la cría e industrialización de conejos en escabeche se construyó un embute en donde se imprimía “Evita Montonera

Escribe Laura Alcoba: “ Salvo cuando Diana me pide que haga compras por el barrio, ya casi no salgo de la casa. Sobre la pequeña mesa de la cocina, pasamos largas horas empaquetando centenares de ejemplares de Evita Montonera.”


Chicha recuerda

María Isabel Chorobik de Mariani afirma en un video: “La esperanza es eso que me mantiene viva esperando encontrar a mi nieta pero buscándola a la vez. Su memoria se localiza el 21 de noviembre de 1977. Alicia de la Cuadra, que fue la primera Presidenta, le informó a Chicha que el gobierno norteamericano enviaba a Cyrus Vance a buscar información sobre violaciones a los derechos humanos. Cuenta Mariani: “Fuimos con Licha a Buenos Aires y nos encontramos con otras madres de chicas embarazadas en Plaza San Martín. Ahí nació Abuelas bajo un jacarandá.” Casi ocho meses después que Madres. Continuaba una lucha que las llevó en los meses siguientes a recorrer todos los Juzgados de Capital y Provincia. Un rictus de amargura se dibuja en el rostro de Mariani. Así lo relato ante la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata en el ya lejano 7 de abril de 1999: “Otra búsqueda de Clara fue en la Iglesia. Todas las abuelas y madres hemos buscado en la Iglesia y alguien me recordó que mis hijos se habían casado en la Capillala Capilla del Valle se había casado con profunda religiosidad Diana y Daniel; Diana era atea así que previamente hubo un bautismo de ella y todo eso lo hizo monseñor Montes. Fue un casamiento muy especial y el bautismo también. Cuando me recordaron que podía recurrir a monseñor Montes fui, pero previamente traté de conseguir una entrevista con monseñor Plaza, que por supuesto no me recibió y si lo hizo un agente que tenían en el sótano. Después me recibió monseñor Montes. Fui llorando porque acababan de matar a mi hijo…. Le conté todo sin acordarme de donde estaba Monseñor Montes, no recuerdo el nombre. En darles los nombres. Me dijo que me iba a ayudar a encontrar a la niña. Me fui esperanzada. Una semana o diez días después volví. Estaba muy serio y me dijo que dejara de buscarla, que dejara de molestar y le dije a quien. Y me contestó a la gente que la tiene, porque la nena está bien y no se puede molestar a esa gente. Le contesto que es mi nieta y me contestó que estaba poniendo en peligro a la gente que la tenía. Insistí y, finalmente me dijo que rece. Y yo le pregunté que tenía que hacer. Y me dijo: señora rece. Le contesté que rezo desde el primer día, porque no tengo otra. Me dijo: a usted le falta fe, se puso de pie y me señaló la puerta. Me fui para siempre de la Iglesia.”


La vida y su trama imaginativa

Laura Carlotto y Daniel Mariani militaban en Montoneros. Laura decide mudarse y le pide ayuda a Daniel. El padre de Laura, Guido Carlotto le presta la camioneta. Se hace el traslado al nuevo domicilio. Por causas no esclarecidas Daniel vuelve al anterior domicilio de Laura, dejando la camioneta a varias cuadras de distancia. Pasan las horas y como no regresa Daniel con la camioneta, Guido Carlotto va a la casa, lo detienen las fuerzas represivas y lo llevan detenido. Chicha conoce los hechos por el relato de Guido cuando es liberado, por el matrimonio Aued que estaba en la casa y por una señora Hilda Caminos. “Le tiraron desde adentro- pretendió entrar y le tiraron- cayó herido en el piso y lo mataron a patadas y culatazos. Luego lo subieron a un vehículo y lo cubrieron con una manta”.

La vida y su trama imaginativa para desarrollar un drama. La segunda y la tercera presidentas de Abuelas de Plaza de Mayo entrelazadas por los destinos entrecruzados de sus hijos. Las dos, hasta ahora, no han podido recuperar a sus nietos Clara Anahí y Guido.

Ambas han logrado el milagro de devolverles la identidad a muchos nietos apropiados.

La vida es una libretista imaginativa. Podría cerrar esta historia con un final feliz.

Chicha y Estela han hecho lo imposible, para que Dios, si existe, se acuerde de ellas.

A 33 años del golpe criminal establishment- militar, Chicha y Estela saben que el tiempo juega en contra. Pero sus esperanzas son más fuertes que las tragedias que la han azotado.


Laura Alcoba recuerda

“Curiosamente, el momento de la despedida de Diana y Cacho se ha borrado por completo de mi memoria. El clima del país no era, precisamente, de fiesta, pero¿ habremos aprovechado para comer un conejo? Sin duda.

Diana, de eso si me acuerdo, ya estaba a punto de dar a luz. Me veo aún diciéndole lo triste que me ponía partir antes que naciera el niño. Más tarde, supe que ella y Cacho habían tenido una hija, Clara Anahí, el 12 de agosto de 1976.” Más adelante Laura cuenta como se entera de lo sucedido leyendo el libro “Los del 73 Memoria Montonera” de Gonzalo Leonidas Chávez y Jorge Lewinger: “ En un enfrentamiento producido ayer, poco antes de las 13,40 horas, cuando efectivos de seguridad procedieron a rodear la manzana situada entre las calles 29,30,55 y 56 se observó que la atención de los custodios de la ley estaba concentrada en una vivienda ….con una placa en la que figuraba la inscripción Daniel Mariani, Licenciado en Economía…..Poco antes de ser utilizado el mortero con el cual se acalló la resistencia, acudió al enfrentamiento el Comandante del Primer Cuerpo, General Carlos Suárez Mason, el Comandante de la Décima Brigada de Infantería, General Adolfo Sigwald, y el titular de la Policía Provincial, coronel Juan Ramón Camps” “ Los tiros cesaron alrededor de las 16,55. Cuando la policía entró en la casa, encontró siete cadáveres: los de Roberto César Porfirio, Juan Carlos Peiris, Eduardo Mendiburu Elicabe y Diana Esmeralda Teruggi, más otros tres totalmente carbonizados, que no pudieron identificarse”


Chicha, Laura y Clara Anahí

Entre el 11 de marzo de 1973 y el 24 de marzo de 1976 apenas transcurrieron tres años. Un tiempo muy reducido donde se pasó del sueño a la pesadilla. De la esperanza a los años de plomo. En el medio se produjo la muerte del político argentino más importante del siglo XX. El rodrigazo fue un anticipo de lo se divisaba en el horizonte. La Triple A un ensayo borroso y premonitorio de convertir a las tres fuerzas armadas en una gigantesca triple A. Sin embargo el gobierno de Isabel fue desplazado no por sus groseros errores sino por algunos aciertos y por ser una representación deformada, pero representación al fin de la soberanía popular. El golpe era inexorable desde la muerte del fundador del peronismo. Ahora si serían eficaces para demoler el modelo de sustitución de importaciones. Desindustrializar para terminar con el monstruo que habitaba en sus entrañas: la clase obrera y los sindicatos. Y la clase media radicalizada pagaría con su vida o el exilio el intentar unir su destino con los sectores populares. A ello resultarían funcionales los grotescos errores de la guerrilla que reemplazó la política de masas por el terrorismo y el militarismo.

Chicha, Laura, Clara Anahí son símbolos de una enorme derrota popular. Son testigos, testimonios y víctimas de ese sueño convertido en pesadilla. Chicha perdió a su hijo, a su nuera y su nieta fue apropiada, lo que demuestra hasta que grado el poder económico en la Argentina puede llegar.Campos de concentración, torturas, apropiación de lo hijos recién nacidos de las prisioneras embarazadas y después de parir ser arrojadas vivas al mar. Clara Anahí es el botín de una cacería desatada después del 24 de marzo. Realizado bajo la cobertura de una guerra inexistente, que no respetaba ni siquiera las leyes implícitas de una contienda bélica. Laura, según sus propias palabras: “Voy a evocar al fin todas aquella locura argentina, todos aquellos seres arrebatados por la violencia. Me he decidido porque muy a menudo pienso en los muertos, pero también porque ahora sé que no hay que olvidarse de los vivos. Más aún: estoy convencida de que es imprescindible pensar en ellos. Esforzarse por hacerles, también a ellos, un lugar. Esto es lo que he tardado tanto en comprender, Diana. Sin duda por eso he demorado tanto…..quiero hacerte una última confesión: que si al fin hago este esfuerzo de memoria para hablar de la Argentina de los Montoneros, de la dictadura y del terror, desde la altura de la niña que fui, no es tanto para recordar como por ver si consigo, al cabo, de una vez, olvidar un poco”

En un reportaje a la revista VIVA, Laura confesó: “Lo que me llevó a escribir fue volver por primera vez a la casa, en el 2003. Antes había viajado a la Argentina, pero nunca había visto la casa. Volví con mi hija de pocos meses…”


Un encuentro y una ausencia

La historia del encuentro entre Chicha y Laura está narrado en el libro de esta última “ La casa de los conejos”: “Acompañada por Chicha, casi treinta años después, en La Plata, pude volver a ver lo que queda de la casa de los conejos. Hoy una asociación se ocupa de ella y trata de convertirla en un espacio de recordación. Chicha está al frente.

En ese lugar, aún puede distinguirse el emplazamiento de la imprenta clandestina. Una placa explica de que servía este extraño espacio estrecho, encerrado entre dos muros, hoy en gran parte devastados. Pero la palabra embute no aparece, ni siquiera entre comillas.

Si. Creo que ha desaparecido definitivamente. Todo muestra que el ataque fue de una violencia inaudita. No existen palabras para la emoción que me invadió cuando descubrí, en cada cosa recordada, las marcas de la muerte y de la destrucción. Un solo disparo de mortero horadó dos paredes. Perforó la fachada y luego abrió un agujero idéntico en el muro que separaba el cuarto de Diana y Cacho de la cocina.

En el garaje, aún está la furgoneta: un resto de naufragio oxidado y acribillado a balazos. El techo de la casa fue incendiado casi completamente. En la parte de atrás de la casa, allí donde se encontraban los conejos y la imprenta, no quedan sino ruinas de lo que yo había conocido. Ruinas y escombros. Nada más.

Yo quería visitar la casa. Quería sobre todo hablar con Chicha, y tratar de saber más, cuanto fuera posible……Yo ya sabía que Chicha Mariani era alguien notable, pero cuanto más la miro más se me imponen su fuerza y coraje. Esta mujer que bajo la dictadura perdió a su único hijo y a su nuera, sigue buscando a su nieta desaparecida, Clara Anahí, sin duda entregada a una familia cercana al gobierno ( de entonces).”

Si esta nota sirve para aproximar a Chicha a Clara Anahí, sentiré que borronear papeles y distribuirlos por Internet es más importante de lo que creo. Porque como dice Laura Alcoba: “Clara Anahí vive en alguna parte. Ella lleva sin duda otro nombre. Ignora probablemente quiénes fueron sus padres y como es que murieron. Pero estoy segura, Diana, que tiene tu sonrisa luminosa, tu fuerza y tu belleza.

Eso, también, es una evidencia excesiva”


Publicado por Hugo Presman


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13 julio 2009

TRAVESÍA EN EL DESIERTO

Cuando el oprimido incorpora el discurso del opresor y lo toma como propio, el círculo de la colonización cultural se ha cerrado. Muchas veces un cabecita negra se refiere a otro de la misma condición con la adjetivación de “negro de mierda”. O alguien de clase media adopta todos los prejuicios de las clases altas y en su afán de “pertenecer” lo recita como discurso propio. O un empresario que le va muy bien porque lo favorece una política de desarrollo capitalista acompañado de una mejor distribución del ingreso, recita como un catecismo viejos prejuicios heredados como que no soporta la soberbia sindical o los controles estatales, a los cuales los vive como una limitación insoportable a su irrestricto derecho de propiedad. La colonización pedagógica comienza en la escuela y se acentúa en los últimos años con la presencia omnipresente de los medios. El sindicalista Ángel Cadelli, confesaba en el programa radial EL TREN, que cuando llega a su casa debe luchar para que su hijo no sea cooptado por tres militantes de la derecha: el televisor, la radio y los diarios. Luis Fernando Beraza en su último libro “Grandes conspiraciones en la historia Argentina” sostiene: “Pese a que los liberales siguen glorificando “aquella Argentina” (se refiere a la del Centenario), lo cierto es que la educación ha servido y sirve para reproducir el sistema social, pese a la gratuidad y obligatoriedad de los estudios…..Los intelectuales han elegido siempre su condición de clase antes que su ideología. Es por ello posible- como hemos podido ver en la actualidad en nuestro país- que figuras supuestamente de izquierda apoyen a los factores de poder, o que ciudadanos de clase media opinen- influidos por los medios masivos- contra sus propios intereses.” En la Argentina, hay versiones de la historia escrita por los vencedores y otras narradas desde la argumentación de los vencidos. La escrita a partir de los intereses de los triunfadores es una forma fundamental de colonización pedagógica. Con la que nos hemos educado millones de argentinos. Una historia sin carne ni sangre. Que ahuyenta el interés y por lo tanto su conocimiento. Esa versión oficial de la historia política, es una política de la historia. Carecer de una interpretación del pasado en sus líneas básicas es como un navegante que no tiene instrumentos de orientación. La historia no es nada más que la política del pasado, como la política es la historia del presente. Lo decía con claridad el más notable analista de estas tierras de la segunda mitad del siglo XIX, Juan Bautista Alberdi que afirmaba: “ Entre el pasado y el presente hay una filiación tan estrecha que juzgar el pasado no es otra cosa que ocuparse del presente” Esa ignorancia lleva a que no se tenga idea de que la mayor parte de los héroes de la Independencia al sur del Río Grande, lucharon con la concepción estratégica de una gran Nación Latinoamericana. El ensayista y político Jorge Abelardo Ramos afirmaba: “Latinoamérica no está dividida porque es subdesarrollada, sino que es subdesarrollada porque está dividida”.

La ignorancia como exhibicionismo impúdico

Examinemos a algunos de los ganadores del 28 de junio. Francisco de Narváez en una pequeña biografía del diario Clarín, que se manifestó favorable al candidato, publicada el mismo día de las elecciones, consigna que no terminó el secundario y que no lee libros. No es el caso de Lula o Evo que construyeron su cultura política en la militancia partiendo de condiciones extremadamente limitadas y no pudiendo abordar una educación formal integral. Llama la atención el escaso acceso a la educación básica del millonario, cuando un título universitario es un valor muy apreciado y necesario en el nivel social que siempre transitó el ex dueño de Casa Tía. Invitados a la mesa de los almuerzos de Mirtha Legrand, el cuarteto de triunfadores (Macri-De Narváez- Michetti, Solá) festejaron con sonoras risas de aprobación, la brutal superficialidad e ignorancia de la ex actriz, cuando teatralizó el momento en que la presidenta afirmó que iba a hacer una declaración importante, ella pensó que se iba a referir a la gripe A. Ante su sorpresa- dijo- hizo referencia a Honduras. ¡Que me importa a mi Honduras! exclamó sin ruborizarse. Al tartamudeo y risa impostada de Gabriela Michetti, el Ingeniero Mauricio Macri creyó conveniente realizar un remate, que convalida aquella precisa frase de Sarmiento: “El título no quita las orejas”. Dijo con su mala dicción y con la papa en la boca de sujeto de probeta de Barrio Parque: “ Tengo que decirte Mirtha que estás en tu mejor momento” Inútil sería mencionarle al ingeniero sin luces intelectuales, a la Licenciada arribista, al millonario con secundario inconcluso y al Ingeniero Agrónomo paquete, de familia aristocrática con olor a bosta, que Francisco Morazán lucho por Los Estados Unidos de América Central, y eso le costó la vida, ya que murió fusilado. A los cinco Honduras no les interesa. Ellos fueron educados en la historia de los vencedores, a los cuales pertenecen o tratan de representar. Menos exigencia se puede tener con la Doña Rosa de los almuerzos, que según apunta con su habitual ironía Orlando Barone: “Además Honduras quiere decir cosas profundas. Y la señora Legrand se especializa en superficies.” En la misma línea de “Chiquita” se manifestó la reencarnación del fundador de La Nación, el columnista estrella Joaquín Morales Solá. En “La Tribuna de Doctrina” del lunes 6 de julio escribió: “¿ Donde está la Presidenta? ¿Dónde está su gobierno? Los argentinos terminarán por hacerse esas preguntas si Cristina Kirchner sigue corriendo hacia donde no la necesitan. Nada es más demostrativo de la influencia de las ideologías en el matrimonio presidencial que las fotos de anteayer: Cristina se peleaba con el gobierno de facto de Honduras desde Washington, y su esposo se empalagaba aquí entre los halagos de los intelectuales paraoficialistas de Carta Abierta. Un país aguardaba vanamente, mientras tanto, que los dos remontaran la derrota, que dejaran las ideas de lado y se dedicaran a las cosas” El otro ganador y gran esperanza del establishment es Carlos Alberto Reutemann quién en la Revista del diario La Nación, entrevistado por Any Ventura declaró: “Yo tengo una excelente relación con los que no piensan tanto. Con lo espontáneo. En cambio, los que piensan tanto le buscan la pata a la sota, miran si estudiaste en la Sorbona o no(se ríe) Además, lo siento en la piel. Para los intelectuales, verme a mí es como ver al diablo ( se ríe abiertamente), porque “no habla”, o “no habla de esto o de lo otro”. Cuando pasan cien vacas, yo les cuento la cabeza. Pero hay tipos que son tan complicados que les cuentan las cuatro patas y después dividen por cuatro. Les da igual”.

El poder no necesita mucho refinamiento

Los representantes que le sirven o aquellos que directamente son el poder no necesitan que los mismos accedan al pensamiento complejo. Educados o domesticados en la enseñanza formal, condimentadas sus ideas elementales con el aderezo de la historia mitrista, alabados por los medios del establishment, educados en colegios privados, practican el viejo axioma sarmientino de “civilización y barbarie” Ellos son la civilización, todo lo que huela a popular es la encarnación de la barbarie. Pero sería bueno advertirles, que mientras celebran el haber obtenido en distintos distritos, legítimamente, la mayor cantidad de votos, el poder económico es el verdadero ganador. Ese al que el periodismo puro e independiente, entrevista pudorosa y tímidamente, a los cuales omite cautamente cuando se habla de “libertad de prensa” Eso queda claro cuando se lee al propulsor y propagandista de la soja, el director de Clarín Rural, el Ingeniero Héctor Huergo, que en sucesivas notas eufóricas, expresa sin limitaciones su exultante entusiasmo. En el Suplemento de Clarín del 4 de julio bajo el título “Ganó la Argentina verde y competitiva” escribió: “El resultado electoral es un triunfo contundente de la Argentina Verde y Competitiva. Ganó la soja. Ganó el modelo eje Rosario- Córdoba, el nuevo centro de gravedad de la economía argentina. La sociedad entiende que no se puede atender las necesidades de los sectores postergados, representados por el eje Matanza-Riachuelo, expoliando al interior genuinamente productivo. Como decíamos una semana atrás, no es desnudando al santo del interior como se va a vestir al santo del conurbano. Hace falta “otro modelo” El resultado electoral es un hito más, si no la culminación, del camino iniciado cuando el gobierno intentó la exacción de la renta agropecuaria con las retenciones móviles. Todos los referentes que emergieron como ganadores tuvieron que ver con la fenomenal epopeya del campo, cuando le puso la mano en el pecho a un gobierno que, en nombre de la mesa de los argentinos, jaqueó nada menos que a la Segunda Revolución de la Pampas. Así, se empieza a expresar en la arena política una realidad diferente. Es paradojal que mientras el centro de gravedad de la economía y la sociedad argentina se corría más hacia el norte, la conducción política caía en manos del lejano sur, rentista de recursos naturales no renovables. Si, es el “soy power”( el poder de la soja). Es la respuesta de la sociedad ante el ataque absurdo que se intentó contra el nuevo maná que cayó sobre estas pampas. No hay nada más explícito que el paso de Carlos Reutemann, que se plantó ante la opinión pública como un adalid de la nueva agricultura. Felipe Solá es el que liberó en 1996 el uso de la soja modificada genéticamente, la gran llave de la expansión… …Julio Cobos, el otro gran ganador, también representa esto. No tanto por provenir de una provincia que experimentó su propia revolución agroindustrial, con el advenimiento de nuevos vinos de calidad, sus frutas y hortalizas, la riqueza construida con enorme esfuerzo en sus valles regados. Todo esto está sucediendo, pero fue su voto no positivo de aquella noche memorable lo que lo lanzó al estrellato político. Fue también la soja y todo lo que representa. El porteño Macri habló, en su breve arenga en la noche del domingo, del rol de la agroindustria. De Narváez también…..Lo que está sucediendo, entonces, es que el país que se venía edificando desde el interior, ahora avanza hacia el poder con sus propios candidatos” No es necesario formular ningún comentario. Huergo es transparente. Como Hugo Biolcati, Presidente de la Sociedad Rural que el 27 de septiembre del 2008 en la Página 4 de Clarín Rural sostenía: “Las retenciones deberían ser cero. Pero aceptamos una reducción gradual.” Ahora declara al diario La Capital de Rosario el 6-07-2009: “ Es importante que nos convoquemos a un acuerdo, a trabajar. Nadie debe rasgarse las vestiduras, la democracia es así: primero nos invitaron a ganar el Congreso y ganamos, ahora nos invitaron a ganar en las urnas y ganamos. Bueno, entonces empecemos a trabajar juntos” El gobierno, a su vez, suele promover funcionarios con declaraciones y actitudes que empalidecen a los notables títulos de la Revista satírica Barcelona. Ahora es el turno del flamante titular del ANSES, el muy joven Diego Bossio, cuya esposa es la número dos de la SIGEN (Sindicato General de la Nación). Es decir el organismo encargado de controlarlo. Ante esta situación anómala, el funcionario de 29 años, sin ponerse colorado, declaró: “Ella sabe cómo controlarme y lo hará muy bien”

Travesía en el desierto
La restauración conservadora avanza. El desierto de un país que en la cosecha actual cubre el 65% del territorio cultivable con soja. La Argentina como productora de alimentos tiende a ser un recuerdo. Produce forrajes para chanchos. Creer que este es el camino y ese nuestro resignado destino es la verdadera fiebre porcina. Que es una pandemia mucho más peligrosa que la gripe A. Es la gripe S. Conformando una sociedad con enormes excedentes de carne. De carne humana. En forma de expulsión poblacional. El problema es que Europa cierra las fronteras para la inmigración. De manera que ya no queda ni siquiera el módico consuelo para aquellos cuyo futuro primermundista era limpiar baños o hacer de mozos, o de empleados de limpieza. Mientras tanto en la mesa de Mirtha no entran en Honduras. Ríen contentos. A las puertas del Centenario. La de la Argentina primaria exportadora. Es una película del cine mudo, ahora con sonido y en colores. Y que mejor para que haya una continuidad entre la versión muda y sonora, que el actor principal sea el que mejor da con el papel: el Lole Reutemann. Demasiado locuaz para el cine mudo. Demasiado parco y monosilábico para el cine sonoro. El Segundo Centenario intenta ser una remake del primero. Es una saturación desafortunada. Con una versión ya había sido
suficiente.



10-07-09
Publicado por Hugo Presman.



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