EL JURADO Y LOS VEREDICTOS DE LA REVISTA NOTICIAS

La revista Noticias se caracteriza por títulos de tapa estruendosos y profusión de páginas.  Seguramente su insustancialidad inversamente proporcional a su tamaño, será el motivo por el cual, hasta llegar a la nota gancho y  desplegarla, ha perdido en su recorrido toda la dinamita y apenas contiene una dosis miserable de cebita para los más antiguos, y de mediocres juegos artificiales para los más jóvenes.

 Es una forma tramposa de ejercer el periodismo, que  la editorial Perfil define como “periodismo puro”, sin que el pudor arrobe las siempre juveniles mejillas del veterano Jorge Fontevecchia.

En el último número, del 24 de diciembre, realizó su habitual cobertura de los mejores y los peores en distintos rubros. 

El mal llamado jurado estuvo conformado en los dos últimos años por Jorge Lanata, Margarita Stolbizer, Francisco de Narváez, Joaquín Morales Solá, Victoria Donda, Magdalena Ruiz Guiñazú, Fernando Braga Menéndez, Artemio López, Beatriz Sarlo, Marcos Aguinis, Graciela Rômer, Julio Bárbaro, y Alfredo Leuco. A ellos se sumaron en el 2009: Elisa Carrió, Sergio Bergman, Alberto Cormillot, Juan Becerra, Nik, Julio Cobos, Gerardo Morales, Nina Pelozo, Nelson Castro, Mario Das Neves, Juan Ignacio de Mendiguren, Juan Carr, María O`Donnell, Sergio Berensztein y Ricardo Rouvier. Estos últimos fueron reemplazados en el 2010 por: Luis Majul, Paula Bertol, Ernesto Sanz, Pino Solanas, Sergio Massa, Rafael Bielsa, Graciela Ocaña, Roberto Pettinato, Luis D`Elias, Martín Sabbatella, Omar Bello, Daniel Sabsay, Guilermo Marcó, Santiago Kovadloff y Daniel Hadad.

Resumiendo: el jurado según los voceros del periodismo puro está integrado por 28 miembros, de los cuales 13  lo integraron en los dos últimos años. Pero la primera mentira del pretendido periodismo puro es que no existe tal jurado en el sentido que todos sus integrantes se reúnen y deliberan, y cada uno en presencia de los restantes da las razones de su voto. Es una encuesta realizada a 28 personas por teléfono o correo electrónico que luego se tabulan y cuyos resultados nadie está para verificar. Llamar  jurado a una encuesta tan reducida y realizada sin las normas técnicas de la estadística, es tan engañoso, falso y tendencioso como los títulos habituales del semanario. Y todo eso se envuelve como periodismo puro. Que la Editorial Perfil realice una de sus habituales argucias no sorprende. Lo que si llama la atención es que muchas personas respetables de la vida política e intelectual argentina se presten a este ardid para legitimar lo que ya está señalado desde antes del pretendido veredicto. Y que algunas de esas personas dignas concurran por segunda vez a que se los  señale falsamente como jurados, cuando apenas han respondido a una encuesta, es una ingenuidad en la visión más permisiva y una lamentable complicidad en la mentira en la instancia menos favorable. Y cuyos resultados implican un intento de descalificación de personas en forma arbitraria.

Veamos cómo se expidió “el jurado” en los dos últimos años. El mejor político en el 2009 y 2010 fue el radical Ernesto Sanz. El peor fue Guillermo Moreno en el 2009 y en el año que concluye Elisa Carrió. La mejor funcionaria fue Graciela Ocaña el año anterior y Nilda Garré en el actual. En el rubro periodistas, el peor en los dos años considerados fue Orlando Barone acompañado en el 2010 por Víctor Hugo Morales. El mejor fue Joaquín Morales Solá en el 2009 y Alfredo Leuco en el 2010.

Es llamativo que la empresa periodística no explique cuáles son los parámetros para las designaciones. Este año en la página 7 abre un precario paraguas de explicaciones endebles bajo el título “Votación polémica” en dos de sus párrafos dice: “También el rubro Peor Periodista pronostica controversias. Este año comparten esa calificación Víctor Hugo Morales y Orlando Barone, quien ya había sido elegido en el 2009. En esa oportunidad, el panelista de 6,7,8 criticó duramente a esta revista.

Por eso cabe recordar que, al igual que se viene realizando desde hace quince años, quien elige es un jurado de reconocidas personalidades que, en forma secreta, votan rubro por rubro. El resultado surge de contabilizar cada voto…….Esta vez la elección de Víctor Hugo como Peor Periodista también resultó una sorpresa para esta redacción. Fue desde aquí que se lo postuló para el Premio Perfil a la Libertad de Expresión 2009, que compartió con Joaquín Morales Solá. Se lo hizo en el entendimiento de que ambos, desde sus reconocidas trayectorias personales, reflejaban dos posturas enfrentadas y honestas sobre la Ley de Medios. Estamos convencidos de que los resultados de la Encuesta 2010 están cruzados por la polarización extrema que el kirchnerismo generó. Y a quienes los votaron no pensaron en las trayectorias de Barone y Morales, sino en las posiciones que ambos tomaron en relación con el gobierno.”

Sumido en  contradicciones flagrantes, la revista confunde tendenciosamente encuesta (mencionada por única vez) con jurado. Incluso en la bajada de la nota se dice: “Un jurado convocado por NOTICIAS elige a los ganadores y perdedores del año” 

 Queda claro a confesión de parte, que no se juzgan valores profesionales sino posicio- namientos políticos. Esto es un ejercicio de macartismo envuelto en el slogan publicitario de periodismo puro. Resulta ocioso señalar la escritura punzante e irónica, muchos de los enfoques originales de Orlando Barone.  En el mes de enero, un grupo de periodistas, indignados por la injusticia que se había perpetrado caprichosamente contra el periodista y escritor, publicamos una solicitada en Página 12 bajo el título “En defensa de Orlando Barone.”  

Víctor Hugo es el mejor relator de fútbol en español de las últimas cinco décadas. Poseedor de un lenguaje pulido y preciso, de una amenidad poco frecuente, ha incursionado con señalado éxito en los programas radiales, periodísticos radiales de interés general, como “La Radio” y “La Mañana”, entre otros. Lo que se está castigando en el periodista uruguayo, es su apoyo a la ley de medios y su enfrentamiento histórico con el multimedio Clarín, que lo colocó en la misma vereda que el gobierno y en su defensa en general. Sería interesante imaginarse si cuando este periodista se alineó con las patronales del campo y cuando su oposición al gobierno lo llevó en los primeros momentos a sospechar y mirar críticamente a la ley de medios, los votantes en la encuesta de Noticias lo hubieran postulado al peor periodista. Aunque implique hacer una historia contrafáctica, es fácil afirmar que no. 

 

“Casualmente” siempre los mejores periodistas son voceros tradicionales del establishment o algunos advenedizos recientes.  En 1995, 1996 y 1997 fue elegido Mariano Grondona, en este último año lo compartió con Morales Solá. En 1998 fue elegida Magdalena Ruiz Guiñazú. En 1999, Nelson Castro. Desde el 2000 al 2006 fue elegido Joaquín Morales Solá, que lo compartió con Nelson Castro en 2002 y 2005. En 2007 lo ganó Jorge Lanata. En 2008 y 2009 nuevamente Morales Solá.

Finalmente dos consideraciones finales con respecto a los elegidos como mejores en los rubros periodismo y política: no se juzga en esta nota  las buenas cualidades profesionales del colega Alfredo Leuco. Sólo se apunta a dos circunstancias que lo tuvo como protagonista. Días antes de los festejos del Bicentenario que tuvo una concurrencia en los tres días de su realización de alrededor de cinco millones de personas, sin un solo incidente, el periodista cordobés escribió cuando ya se observaba la notable concurrencia: “Nadie debe sorprenderse. El Bicentenario, en lugar de convertirse en un símbolo de la unidad y cohesión nacional, va a expresar como nunca desde 1983 la fractura expuesta de una sociedad envenenada por el odio……Y por eso , entre otros motivos tanto en Córdoba como en Buenos Aires cuesta encontrar banderas colgadas en los balcones de las casas particulares. Los contestadores telefónicos de las radios, las conversaciones de ocasión en supermercados y una módica cadena de mails fogonearon el estado de ánimo de bronca de mucha gente e incitaron a manifestar su descontento con los Kirchner dejando desnudos los frentes de sus domicilios…¿ Que es lo que a los ciudadanos les extingue el patriotismo? El fanatismo. Lamentablemente en esta Argentina de florecimiento económico, atomización social y fragmentación política, el sol del 25 no viene asomando. Y la patria sigue siendo ese dolor que no aprendemos a llorar”.

El otro fue uno de los bloopers históricos del periodismo argentino: el bloguero Lucas Carrasco escribió en su blog una humorada acerca de su amor a una chica de nombre Agustina de la producción del programa “Le doy mi palabra” de novia con un productor de ese programa que conduce Leuco. Irónicamente decía que si no se separaba, iba con una ametralladora y los mataba a todos. El tono burlesco era evidente pero el periodista por Radio Continental primero, y luego en su programa televisivo se paró ante las cámaras e informó en tono dramático que había sido amenazado de muerte por el bloguero y que hacía la denuncia siempre que antes no llegara Carrasco con su ametralladora. Parecía una escena teatral de la revista Barcelona. Pero si el ridículo no fuera suficiente, algunos de los integrantes del “jurado” repudiaron las “amenazas” de Lucas.

Con relación a Ernesto Sanz tuvo declaraciones tan desafortunadas que lo acompañarán el resto de su vida. Con relación a la asignación por hijo, una de las pocas medidas del gobierno elogiada por la oposición afirmó: “Desde que se implementó el Programa de Asignación Universal por hijo, los datos marcan que lo que se venía gastando en juego y droga ha tenido un incremento.” Silvano Santander y Ernesto Sanmartino, radicales como Sanz, deben revolverse en sus tumbas por haber vivido cuando la revista Noticias no existía. Seguramente afirmaciones como: “Usan el parquet para hacer asado” o “El aluvión zoológico” los habría hecho acreedores en diferentes momentos, a ser elegidos como los  mejores políticos.

27-12-2010    

TODOS LOS LOS DERECHOS RESERVADOS . Hugo Presman.