30 diciembre 2016

SALUDO DE FIN DE AÑO:

 DIFICIL PRESENTE, INCIERTO FUTURO

 Ha sido uno de los años más difíciles, cuya dureza nos remite a principio del siglo XXI. El futuro, si se es realista y se está alejado de los libros de autoayuda, no es esperanzador. El país está siendo refundado tratando de terminar con un empate histórico que se arrastra  desde el inicio de nuestro país. Pero más allá de cierta desazón, no podemos dejarnos arrastrar por el desaliento, razón por la cual comparto con Uds. un cuento.   
EL DESALIENTO
Se había corrido la voz de que el diablo, por fin dejaba el negocio. Y parece que era así nomás, porque en la puerta de su enorme mansión había un largo caballete con todas las herramientas del diablo a la venta. Y por ahí estaban los odios, las guerras, todo, todo ahí expuesto y los interesados preguntando precios. Así que un señor requería ¿cuánto me sale ésta guerra? Y por dos ¿Me hace precio? Y así estaba hasta que en un costado había una herramienta con forma de cuña, muy gastada, muy usada se veía. Así que este hombre le preguntó al diablo: Y esto ¿Qué es? ¡Ah! Mi amigo, le contestó el diablo  eso, eso es el desaliento. Y ¿Cuánto cuesta? le preguntó el hombre. La respuesta lo dejó anonadado. Un despropósito el precio. Pero dígame porque tan caro. Sabe porque mi amigo, respondió con seguridad el diablo. Cuando a mí las otras herramientas ya no me dan resultado, yo apelo al desaliento. Yo con el desaliento, me meto en la persona y hago con ella lo que quiero. Bueno, el desaliento era tan, pero tan caro que el diablo no lo pudo vender, así que un consejo: anden con cuidado porque el desaliento sigue siendo propiedad del diablo
BRINDIS
Levanto la copa, a pesar de las circunstancias, desde la locomotora de EL TREN en Radio Cooperativa, que está en el aire desde hace más de trece años en forma ininterrumpida,  desde el programa Mediodías con Opinión en la RSO de Marcos Paz que cumple 18 años sin interrupciones, desde las Notas de Actualidad que ya llevan 19 años, desde la Señal Medios con más de un lustro, y mi blog http://presmanhugo.blogspot.com.ar, que ustedes tienen la gentileza de ingresar para ver, leer o escuchar  desde hace más de 8 años,  deseándoles que sigamos brindando por la vida, tal vez  en los términos que lo expresaba Jean Paul Sartre:  “Somos lo que hacemos, con lo que la vida ha hecho de nosotros” O quizás como nos increpa el Papa Francisco cuando nos dice: “No sean cobardes, no balconeen la vida”
NO OLVIDAR A LOS QUE SE ESTÁN CAYENDO DEL BARCO DEL TRABAJO, ARROJADOS A LA INCLEMENCIAS DE LA DESOCUPACIÓN, A LOS QUE ESTÁN ACOSADOS POR EL HAMBRE, A LOS QUE SUBSISTEN ALIMENTANDOSE  EN LOS COMEDORES SOLIDARIOS, A LOS QUE VIVEN AMARRADOS A UN TRABAJO INESTABLE, A LOS QUE CADA DÍA LIBRAN SU LUCHA INCLEMENTE CONTRA LA ADVERSIDAD, LOS QUE TIENEN DE COLCHÓN UNA VEREDA Y DE TECHO EL CIELO .
UN BRINDIS POR LOS QUE LUCHAN, A LOS QUE MILITAN PARA CAMBIAR UNA SOCIEDAD CRECIENTEMENTE INJUSTA
MIENTRAS EL TÍTULO DE LA NOVELA DE ANDRÉS RIVERA “LA REVOLUCIÓN ES UN SUEÑO ETERNO” ALIENTE NUESTROS PASOS, LA UTOPÍA SE ACERCA DESDE EL HORIZONTE DONDE SUELE ALOJARSE.

   Hugo Presman



29 diciembre 2016

MILAGROS NO HAY


En el documental sobre los obreros desaparecidos de la firma Mercedes Benz, dirigida por la periodista alemana Gaby Weber con el mismo título de esta nota, el gerente de producción Juan Tasselkraut, preguntado sobre el incremento de la producción después de la desaparición de 14 obreros durante la dictadura establishment- militar respondió: “Milagros no hay”
Esa anécdota luctuosa y terrible tiene numerosos correlatos menos dramáticos, pero con consecuencias posiblemente irreversibles de cara al futuro en el gobierno neoliberal de Mauricio Macri. Cuando en una de sus visitas armadas minuciosamente paras romper con su caracterización de empresario rico insensible, les dice a los concurrentes al comedor de Margarita Barrientos “No coman mucho en las fiestas” revela, además de una obvia falta de tacto, aquello que “lo que natura no da, Salamanca no presta” o la certera frase de Sarmiento que “el título no quita la orejas”.
Pedirle sensibilidad social a quienes siempre vivieron en “las nubes de Úbeda”, puede sintetizarse con aquello de “milagros no hay”. Si hasta la Biblia lo consigna hace dos mil años, cuando pone en boca de Jesús: "Porque es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios"
Basta ejemplificar que al lado del presidente del Banco Central Federico Adolfo Sturzenegger, un discípulo de Milton Friedman, el ex Ministro de Hacienda Alfonso Prat Gay, capaz de las declaraciones más disparatadas e insensibles, sea visualizado por algunos analistas del establishment como Keynesiano. Como bien sostiene el CEPA (Centro de Economía Política Argentina): “la gestión de Prat-Gay incluyó una brutal transferencia de ingresos a los sectores concentrados de la economía a través de la devaluación del 60%, la quita de retenciones al agro, la industria y la minería, la eliminación del Impuesto a los autos de Alta Gama y la reducción de la alícuota del Impuesto a los Bienes Personales, entre otros. No echaron a John Maynard Keynes.” Claro, que al lado de su reemplazante Nicolás Dujovne, conseguirá mantenerse como moderado, si este ejecuta lo que sostiene: “hay mucho empleo público (sobran un millón de empleados), mucho déficit fiscal y eso genera muchos impuestos y mucha necesidad de endeudamiento” Además propone endeudarse con el FMI. Como se ve milagros no hay.
El periodista Mario Wainfeld puntualizó el fin ministerial del hombre que pidió disculpas a los empresarios vaciadores españoles de la siguiente manera: “Se hincó ante los fondos buitres y firmó un acuerdo genuflexoTomó cifras exorbitantes de deuda externa, alegando que su amortización sería barata. Los cambios en el escenario mundial encarecieron los de por sí colosales costos. No supo prever ese viraje, ni siquiera explicarlo. Benefició al sector financiero que fue su hogar y escuela de vida… Entre sus cálculos más refinados se recordará la comparación de los tarifazos de servicios públicos con el costo de dos o tres pizzas…. Se lo describirá, ya se cometió ese relato durante meses, como una ovejita de Wall Street, su patria de adopción, donde solo moran lobos…. Sturzenegger venció en la pulseada internista. Pero Prat-Gay lo emparejó y acaso lo haya superado en el daño que infligió a los argentinos. Se verá con el tiempo, más pronto que tarde…. Nadie lo extrañará. El establishment, que le debe muchos beneficios, porque lo reemplazarán funcionarios igualmente atentos a sus intereses. Y la mayoría de la sociedad  porque cooperó en causar daños que tomará años o décadas mitigar…. Prat-Gay se va por no haber sabido congeniar con sus pares, por su nula cintura política, por su soberbia que no lo afectó cuando se burlaba de los humildes pero sí cuando competía con sus pares.”
Si a esto se suma el desplazamiento de la ex CEO de General Motors Isela Costantini que como presidenta de Aerolíneas esquivó los ajustes brutales y se opuso al ingreso de las líneas de bajo costo, manteniendo una buena relación con los gremios aeronáuticos, evitando los despidos, pecados capitales en el gobierno macrista. Lo único que no es pecado, sino virtud excelsa, es beneficiar al capital. Parece en términos macristas la retirada del gradualismo.
El gurú ultraliberal Miguel Ángel Broda, que tuvo la sinceridad de referirse al déficit fiscal dejado por el kirchnerismo en el 4,1% y no el 7% que es el que hoy ha arribado el macrismo, en un inusitada e imprevista demostración de ironía expresó que mientras el Banco Central pone el aire acondicionado, el Ministro de Hacienda enciende la calefacción. Todo esto en la escala arbitraria y distorsionada del neoliberalismo.    
Resulta llamativo que dentro de un contexto determinado, se efectúen reemplazos absolutamente previsibles posteriores a las elecciones legislativas del 2017,  pero no al inicio de la campaña electoral donde es o era pronosticable que se invernarían los dogmas ultraortodoxos y se haría lo contrario de lo que se preconiza como condición para ganar los comicios que habilitarían el camino de las reformas estructurales, a las privatizaciones, al reingreso activo al FMI, suscribiendo sus préstamos atados. Será el momento esperado de ir por todo, de terminar con el empate histórico entre dos modelos que se expresa en la inestabilidad de la Argentina.  
Los CEOS han incurrido en torpezas inenarrables, declaraciones impúdicas, pero el sector político del gobierno ha exhibido una capacidad de negociación nada despreciable, junto a una negación de la realidad en nombre de la verdad, una serie interminable de hechos benevolentemente caracterizados como anomalías que violan superlativamente la transparencia levantada como promesa. Como milagros no hay, la independencia del poder judicial, un esperpento levantado por los republicanos para ocultar que la justicia no es nada más que lo que el hombre rico dice que es, el macrismo lo lleva a su nivel exquisito, expresado brutalmente en la inocencia de los cómplices del terrorismo del estado, beneficiarios y usufructuarios de Papel Prensa  
Como milagros no hay, Milagro Sala sigue detenida en Jujuy. Más allá de los delitos que pudo haber cometido y que una justicia absolutamente dependiente del odio del gobernador radical no es la adecuada para juzgar, está claro  que lo que el dueño de la provincia (la familia Blaquier), y su delegado Gerardo Morales, quiere dar es un gran escarmiento. La venganza está clara: la monumental obra de Milagro Sala, con las piletas gigantescas, las fábricas levantadas, las casas construidas, en el primer caso están vaciadas y parcialmente saqueadas y destruidas, y de las otras sólo un establecimiento fabril se mantiene en  pie. Si esto no es venganza de clase, ¿qué es? No hay milagro para Milagro Sala. La consigna de la unión de los argentinos está tan deteriorada y falsa como el pillaje que sufre la obra de la dirigente de la Tupac Amarú.
La jueza María Servini de Cubría declaró al diario Ambito Financiero. “Esto yo no lo he vivido con ningún gobierno. Estos no dejan de hacer aprietes y en 42 años de justicia no he vivido nunca algo así”
Como no pueden mostrar un solo índice positivo, el gobierno necesitó apelar a la ciencia-ficción y así nos informaron que fuimos salvados de una crisis terminal. Si Herbert George Wells, más conocido como  H. G. Wells, autor entre otras obras de “La guerra de los mundos” hubiera sido asesor del gobierno en lugar de Durán Barba, el argumento hubiera sido que lograron ponernos a salvo de una invasión de otro planeta o la caída de un meteorito sobre el territorio nacional.
Pocas veces se ha visto una muestra tan insólita, donde las palabras ni siquiera son las sombras de los hechos. Donde dicen verdad solo hay mentira, donde afirman transparencia hay oscuridad y negocios, donde hablan de unión cultivan el odio, donde enarbolan la competencia encubren la entrega descarada. Habrá que enriquecer el lenguaje con adjetivos que reflejen los actuales comportamientos. Cipayos es casi un elogio, un adjetivo de la primera década infame, insuficiente para caracterizar la iniciación de la tercera.
Dos ejemplos de centenares, de miles que atraviesan el escenario político: mientras se retacean al CONICET, tres mil millones de pesos, se le perdonan a las empresas distribuidoras de la electricidad diecinueve mil millones de pesos por decisión del presidente y sin pasar por el Congreso. En cambio el Parlamento aprueba la expropiación del Bauen, explotado por una Cooperativa de Trabajadores desde hace 14 años y el Presidente la veta con la argumentación que  favorece exclusivamente a un grupo particularizado, sin traducirse en un beneficio para la comunidad en general" La doble vara de un gobierno que gobierna sesgadamente para los poderosos.    
A los que sinceramente votaron a Macri, ignorando su curriculum e ideología, esperando que mantuviera lo mucho y positivo que dejó el kirchnerismo y que mejoraría lo que se hizo mal e iría por lo mucho que faltaba, es hora de aceptar lo evidente, que con políticas neoliberales de entrega, milagros no hay.
Pero si  se suman a los que nos oponemos a esta destrucción sistemática, será cierto en sentido contrario y positivo la consigna de CAMBIEMOS: “Si, se puede”, torcer el camino hacia el precipicio.         
No hay sorpresas, salvo la impudicia de las explicaciones o la negación grosera de los índices por ellos mismos suministrados. Es una replay adaptada a los tiempos, de una película vista en dos versiones anteriores que concluyeron en crisis de magnitud. Haciendo lo mismo, o parecido, los resultados, es fácil prever, serán tan nefastos como los ya conocidos y padecidos. Como la muletilla que utiliza hasta el cansancio el jefe de gabinete Marcos Peña, “de vuelta”: MILAGROS NO HAY     
28-12-2016
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28 diciembre 2016

Milagro Sala: sobreseída por amenazas, condenada a tres años en suspenso por daño



El tribunal condenó a la dirigente social a tres años de prisión en suspenso por "daño agravado" durante la manifestación de 2009, que denunció el ahora gobernador Gerardo Morales. Milagro no recuperará la libertad por tener otras causas pendientes de resolución.
 






REPORTAJE A JORGE MAKARZ.


El lunes 26 de diciembre del 2016 se subió a EL TREN, el ensayista Jorge Makarz. Un programa dedicado fundamentalmente a la expulsión del Ministro de Hacienda Alfonso Prat Gay y su reemplazo por Nicolás Dujovne. ¿ Se despedirán a un millón de empleados públicos? ¿Es el nuevo Ministro un fundamentalista del ajuste? ¿Este reemplazo continúa la línea que llevó al desplazamiento de Isela Costantini? 
Una mirada sobre el Movimiento Evita.  La construcción de una nueva mayoría. Un viaje hacia lo profundo de la realidad. ¿Se va a quedar en la superficie?
 

27 diciembre 2016

REPORTAJE A CAMILA ABUSABBAH


El viernes 24 de diciembre se subió a EL TREN, la psicóloga y docente Camila Abussabbah,  con quien se abordó la temática de "Ni Una Menos, para chicos", coautora de dicho texto. El machismo en los juguetes y en la televisión, el modelo de la Barbie rubia contra el Rambo verdeoliva, el sistema del femicidio y la crianza de "princesas indefensas" y "machos violentos" fueron algunos de los tópicos abordados. La realidad como siempre se introdujo cuando se trató el escenario político, entre la resistencia en el CONICET y el entramado de negocios que terminó de confirmar el desplazamiento de Isela Costantini.¿ Te vas a perder este viaje sin desperdicios? 
Para disfrutarlo hasta el año que viene  
                              El TREN, UNA VOZ DIFERENTE PARA ESCUCHAR, REFLEXIONAR Y DISCUTIR
 
                         UN PROGRAMA QUE  NO TE LA DEBE, QUE SÓLO CIERRA, CON TODOS SUS OYENTES ADENTRO  


26 diciembre 2016

DUJOVNE, MINISTRO / La verdad sobre el programa de la nueva etapa


Por GABRIEL FERNÁNDEZ *
El ajuste es la razón de ser del gobierno macrista. La determinación de ubicar a Nicolás Dujovne en el ministerio de Hacienda es una ratificación plena del rumbo hacia su profundización. Con el respaldo de su amigo Carlos Pagni, del diario La Nación, y con el apoyo interior de Federico Sturzenneger, presidente del Banco Central y de Marcos Peña Braun, jefe del gabinete de ministros, el joven funcionario designado evalúa que nivel de vida, consumo, producción industrial, son elementos colaterales que pueden ser sacrificados en el altar de la eterna bandera: Reducción del Gasto Público.
Dujovne presupone, junto a los ministros que hundieron este rico país –Alvaro Alsogaray, Adalbert Krieger Vasena, José Alfredo Martínez de Hoz, Domingo Felipe Cavallo, por citar a los más relevantes, es decir, a los más dañinos- que no corresponde considerar inversión social la utilización dinamizadora de los recursos del Estado. Lo cual no implica dejar de aprovecharlos para sostener emprendimientos privados.
El 20 de diciembre el nuevo ministro publicó una columna titulada "Macri, ante los desafíos de un mundo más exigente" en La Nación. Para el economista, uno de los principales desafíos es reducir el gasto. "Si el Gobierno lograra mantener el gasto congelado en términos reales por los próximos cinco años y la economía creciera 3% por año, el gasto en relación con el PBI bajaría de 45% a 39% en 2021", planteó. "Y si esa estabilidad del gasto permaneciera por diez años, caería hasta 34% del PBI en 2026", añadió.
Como si el objetivo instrumental resultara una virtud estratégica, continuó: "En el primer caso, la reducción en el gasto alcanzaría para eliminar todo el déficit fiscal. En el segundo, para eliminar el déficit, bajar las alícuotas de Ganancias, quitar el impuesto a los débitos y créditos y bajar los impuestos al trabajo a la mitad". Es decir, todo el esquema sólo es posible si se reduce el salario promedio del trabajador argentino y se lo sume en la precariedad.
En ese texto, el ministro designado anticipó lo que viene: "el programa inicial –aplicado hasta ahora por el oficialismo-  debe ser continuado por otro que defina la gestión ya no por la negativa, sino por determinados objetivos concretos y por una descripción metódica acerca de cómo serán alcanzados". Al respecto sugirió "llenar el vacío programático y comunicacional de manera coherente", lo cual debería ser "el objetivo número uno del Gobierno". Esto fue leído como una necesaria conjunción Dujovne – Peña.
No se privó de agitar la promesa jamás cumplida por gobierno liberal alguno en nuestra historia: el mito de los inversores externos. Destacó que "la principal duda de los inversores en materia fiscal se refiere a la capacidad del Gobierno de reducir el déficit". "En lo fiscal, el Gobierno se debate entre tres objetivos en conflicto: bajar el déficit, minimizar los impuestos distorsivos e incrementar el gasto en infraestructura", señaló. En realidad, las empresas transnacionales que sostenían plantas productivas en la Argentina se vienen retirando en los últimos meses, precisamente por la retracción del mercado local. Pero ¿quién informa eso?
En cuanto al gasto, el economista mencionó que "una ley de responsabilidad que establezca parámetros en el mediano plazo (incluyendo el gasto de las provincias) y que fije cómo se repartirá la mejora fiscal que provocaría la contención de las erogaciones (entre la reducción del déficit y la eliminación de impuestos) podría ser negociada con la oposición y despejaría en buena medida la duda de los inversores acerca de la solvencia fiscal de la Argentina. Ello abarataría el financiamiento para el Gobierno, las empresas y las familias". El segmento es sorprendente: aventura repartir una eventual e incomprobable “mejora”.
Al referirse a la política energética, cuestionó que "las regulaciones que gobernarán el sector en el largo plazo aún no han sido establecidas". Y añadió: "Parte de ese problema se resolvería si el sector pudiera avanzar hacia una 'contractualización' de la relación entre los productores y los consumidores de energía. Para que el sector pueda 'contractualizarse' hay que definir la regulación. Los efectos sobre la inversión serían notables". Esto es: subsidios mediante, las firmas serán liberadas para cobrar lo que evalúen pertinente a cada consumidor.
Finalmente, Dujovne habló del comercio internacional. No apto para productores y trabajadores cardíacos, estimó que la apertura registrada en el 2016 es insuficiente, por lo cual es preciso "eliminar gradualmente la protección que hoy genera que los argentinos enfrenten sobreprecios insoportables cuando consumen electrónicos, prendas de vestir, juguetes y otros bienes". El funcionario explicó que "ese sobrecosto será removido gradualmente junto con la disminución de la protección en esos sectores. Y la forma de institucionalizarlo vendrá de la mano de la firma de acuerdos de libre comercio, donde el sendero de convergencia hacia la apertura, de 10 o 15 años, quedará establecido".
Como detalle, vale observar que Nicolás Dujovne participó del ciclo final del neoliberalismo. Estuvo en la Secretaría de Hacienda cuando la dirigía Pablo Guidotto entre 1997 y 1998 (en tiempos del ministro Roque Fernández). Fue entonces cuando se abrió el hueco fiscal que fue cavando el ajuste; de allí, la economía zarpó hacia el 2001. Queda la sensación de un Volver al Futuro, con un destino de crisis trazado ineluctablemente. Pero, para entonces, el endeudamiento será otra vez tema de debate y los amigos de Dujovne, desde el diario La Nación, batallarán por el cumplimiento irrestricto de compromisos internacionales adquiridos durante una gestión constitucional.
Es que si en el futuro no pagamos los costos que nos están dejando estos bandidos, quedaremos “fuera del mundo”. Usted, lector, ya sabe el resto del argumento.


25 diciembre 2016

Y en eso llegó un empresario


                                 Por Roberto “Tito” Cossa

Todas las encuestas coinciden: más del setenta por ciento de los argentinos desaprueba la administración del gobierno de Cambiemos, pero la mitad confía en Mauricio Macri. ¿Cómo es posible? ¿Qué explicación tiene? Los mismos profesionales aseguran que Cambiemos tiene un techo de aceptación del veinticinco por ciento, al que llaman el núcleo duro. Es entendible. La cuarta parte de los argentinos vive bien, mejor o igual bajo el neoliberalismo. Además se suman al apoyo subjetividades ideológicas y sociales. Habrá alguno que descendió un escalón, pero comparte la ideología del actual gobierno. Pero ¿y la otra mitad? Veinticinco puntos en la estadística significan millones de argentinos y argentinas. Está claro que esos veinticinco puntos de diferencia provienen de sectores de la clase media, la clase media baja y de los obreros, muchos de los cuáles la están pasando muy mal. Componen lo que los especialistas denominan “mayoría silenciosa” y  elevan su caudal  a un treinta por ciento de la población. No son mayoría pero son muchos; un tercio de los argentinos. No deben ser pocos los que apoyan al gobierno de Macri.
                      
 ¿A quiénes ubicamos dentro de ese magma llamado mayoría silenciosa cuando hablamos de política? Justamente a quiénes la política no les interesa. Más aun, le disgusta. Pero, cuidado, no hay que confundir silencio político con indiferencia social. Muchos silenciosos son personas solidarias dentro de su pequeña comunidad. Capaces de entregar su tiempo al club de barrio o la sociedad de fomento. Un joven solidario dona sangre para un vecino y al día siguiente muele a patadas a un pibe chorro. Sale a la calle por un corte de luz en la cuadra donde vive, pero cuando recupera la energía vuelve a su casa y prende el televisor. Un obrero silencioso hace huelga por un conflicto en la fábrica donde trabaja, pero no se suma a una marcha por un problema de los trabajadores. Me pregunto qué cara pone cuando un militante del FIT le habla de la explotación a la clase trabajadora o le explica lo que es la plusvalía.
En mis tiempos los silenciosos decían  “la política no me da de comer”.   Es decir, gobierne quien gobierne, mi historia personal depende de mí y  no de la política, ni del gobierno de turno. Todo lo que un silencioso pide es seguridad, un buen trabajo y una sociedad sin conflictos. Por eso apostó más de una vez a los golpes militares hasta que descubrió el engaño.
                                                

Sospecho que esta aceptación personal de Macri es porque se trata de un empresario, el primero que llega por medios democráticos. Los silenciosos suelen respetar a los empresarios. Piensan que han hecho plata con su trabajo y su capacidad para hacer dinero, sin preguntarse por qué medios logró su fortuna. Nunca vinculan a un empresario con la corrupción. “Tienen plata, no necesitan robar” escuché decir. Y a veces  son agradecidos porque “dan trabajo”. Jamás vinculan los males del país con la conducta de los empresarios. Si unos les explica las consecuencias de llevarse fortunas al exterior dicen “hacen bien; resguardan su plata”. Surge de las encuestas que, si bien se quejan por las medidas económicas del gobierno, los silenciosos “tienen esperanza”. Es decir, le creen a Macri cuando habla de la herencia recibida, explica que estas medidas “dolorosas” son necesarias y que pronto estaremos mejor.
Curioso país éste. En tiempos del neoliberalismo los obreros confían en el Presidente. Los que desconfían son los empresarios.
PUBLICADO EN  PÁGINA 12 EL 17-12-2016