31 octubre 2013

    El tren 30 10 2013
     Martin Rodriguez                      

 


                                                                    El Tren 31 10 2013
                                                                        Luis Novaresio    

        


30 octubre 2013

                                                                                El Tren 28 10 2013  
   
         
               Hugo Presman y Gerardo Yomal
        




                                                                   El Tren 29 10 2013

                                                                   Gabriel Fernandez
                                                                     

Seguimos el debate sobre los resultados electorales

Seguimos el debate sobre los resultados electorales

Gabriel Fernandez, Hugo Presman y Carlos Raimundi en Mesa de Periodistas 30-10-2013

Fallo por la Ley de Medios: “Lo que hay que hacer ahora es proceder”
Por Radio Gráfica 




Desde la Federación Grafica Bonaerense, Gabriel Fernández, Hugo Presman, Carlos Raimundi y Héctor Amicheti dieron sus opiniones inmediatamente después de que se conociera el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación por la Constitucionalidad de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
En diálogo con Mauro Cavallin, Alicia Lado, Ariel Weinman y Miguel Gudiño, el director periodístico de Radio GráficaGabriel Fernández, informó que “el AFSCA plantea la desinversión ya después del fallo de la corte suprema”.
En la misma línea, Hugo Presman, periodista de La Señal Medios y Radio Cooperativa, expresó: “la verdad que es una gran alegría porque el desarrollo que se chimentaba con relación de como venia la mano en la Corte Suprema desalentaba la posibilidad de un fallo favorable, incluso pensé que la corte iba a tratar de establecer un empate que era un triunfo para el multimedio, en el sentido de que el área de cable no iba a ser tocado, pero la constitucionalidad de toda la ley esta garantizada de manera explicita”.
Por su parte, el Diputado Nacional Carlos Raimundi manifestó que se “imaginaba después de cuatro años este fallo, porque ya el hecho de haber esperado tanto implica una perdida de tiempo muy importante y una ganancia de tiempo a favor de Clarín, a favor de acumulación de negocios, tarifas cobradas y avances tecnológicos hechos con ese dinero, sobre las cuales la corte no puede ser ingenua. Por eso me da la impresión de que este fallo no es consecuente con los anteriores pronunciamientos de la Corte. Me da una sensación de alegría por haber puesto las cosas en su lugar de donde no debían haber salido nunca. Lo que hay que hacer ahora es proceder”.

Por ultimo Hector Amichetti, secretario adjunto del Sindicato Federación Gráfica B0onaerense, aseveró que “es una enorme satisfacción la resolución de este fallo, te voy a ser sincero teníamos serias dudas con respecto de cómo iba a fallar la corte. Pero creo que la contundencia de la argumentación y el contenido de la ley y todo el pueblo que acompaño, me parece que le dieron un efecto tan contundente que la decisión de la Corte no podía ser en contra”.

26 octubre 2013

UN CUADRO EN LA SELVA















En Mercedes se realiza “la fiesta provincial de la torta frita” y la “fiesta nacional del durazno”. Ahí nació y por sus calles correteó el asesino Jorge Rafael Videla; también fue obispo  Emilio Ogñenovich, admirador de Menem y simpatizante de Carlos Ruckauf, quien encabezó una procesión a Plaza de Mayo, con la Virgen de Lujan al frente, en una cruzada contra el divorcio. Para compensar semejante pasivo, ahí nacieron, entre otros argentinos,  el ex presidente Héctor J. Cámpora, el historiador Felipe Pigña, el escritor Roberto Payró, el periodista Osvaldo Príncipi, el músico Raúl Porcheto, el futbolista Lucas Biglia, la actriz Carolina Fal, el tenista Gustavo Luza.
Su intendente se llama Carlos Selva, quien recibió a su actual jefe político Sergio Massa, a quien el primero de sus biógrafos Pablo de León, tituló su libro como “El salto del tigre”: un intencionado juego entre el territorio donde gobierna el candidato a diputado con aspiraciones presidenciales y su identificación con el felino. Wikepedia dice que éste suele ocupar bosques densos. Lo que explica que el tigre se encuentre cómodo en un hábitat como la selva. A su vez el salto del tigre tiene una connotación sexual. La misma wikipedia explica: “Salto del tigre es un supuesto juego sexual en el que el varón se lanza desde cierta altura (p.e. desde lo alto de un armario) sobre la mujer penetrándola durante el aterrizaje. A menudo el salto incluye un salto mortal o algún movimiento aún más arriesgado. En Chile se le conoce como "Vuelo del cóndor", en Colombia como "salto del Armario" y en Guatemala como el "vuelo del zope". Esta acción, que en la práctica no se puede realizar sin causar daño, se utiliza en chistes, bromas, etc. como muestra de ardor sexual en el varón.”













Tenemos entonces un felino que va en busca de un intendente de apellido Selva mientras concreta un fenomenal salto, no precisamente sexual sino netamente político-electoral. Y ahí el intendente de Mercedes descuelga un cuadro en donde se lo veía con el ex presidente Néstor Kirchner, con la complacencia y aprobación del intendente de Tigre, cuyo saludo es un pulgar erguido que reemplaza a la V de la victoria, aquél gesto  que permaneció unido en la epopeya de la resistencia al “Perón Vuelve”. Ni el felino ni Selva parecen conocer la lealtad y el segundo intenta ocultar  su propia historia reciente. Massa cuando era jefe de gabinete despotricó  contra el ex presidente en la Embajada Norteamericana, según el libro de Santiago O`Donnell “Los cables de Wikileaks sobre la Argentina”, donde puede leerse: “Fue despiadado en sus críticas a la pareja presidencial, especialmente a Néstor. Aunque ninguneó los informes de prensa que decían que él y Kirchner se habían agarrado a trompadas en el cuartel de campaña en la madrugada previa a la derrota en las elecciones de mitad de período en junio del 2009, llamó a Néstor “psicópata” y “cobarde”, y dijo que su actitud de matón en la política esconde una profunda sensación de inseguridad e inferioridad. (La esposa de Massa se alarmó a tal punto  por estos comentarios desinhibidos que él le pidió que “dejara de ponerle caras”). Massa cuestionó el argumento que Néstor merecía crédito por ser un táctico magistral, describiendo al ex presidente como un torpe convencido de su propia brillantez que seguramente continuaría cometiendo errores….Dijo que Néstor no se podía relacionar con otro fuera del estrecho foco de sus propias ambiciones políticas: Kirchner no es un genio perverso”, concluyó Massa. “Sólo un perverso.”
Como es fácil percibir, esta bajada de cuadros de Massa y Selva, luego desmentida, posiblemente por las repercusiones desfavorables, es simbólicamente una farsa en relación a aquella  histórica por la cual Néstor Kirchner ordenó en el Colegio Militar de la Nación  al Teniente General Roberto Bendini bajar los retratos de los asesinos Videla y Bignone. Al mismo tiempo tiene el poderoso valor de contrarrestar el discurso massista de dejar atrás el pasado, sustituyéndolo en realidad por un troyano reemplazo, de habilitar el consenso como forma real de claudicar frente al poder económico, de enarbolar  oximorones económicos como aumentar jubilaciones y bajar retenciones, de identificar la inserción en el mundo con la subordinación a EE.UU, mientras transita por todos los estereotipos de un pretendido sentido común.
 En síntesis: no se baja meramente un cuadro de la pared, sino que se levanta un actor cobijado por el establishment y protegido por los medios dominantes, que eligen quien es el más confiable entre Massa, Macri y Scioli. Los dos primeros transitan la vereda de la oposición al kirchnerismo, uno desde sus entrañas y el otro desde afuera pero en coincidencia con los sectores más conservadores de los retazos peronistas y al tercero  se lo examina dubitativamente desde el poder económico con la expectativa de que finalmente se decida a ser una especie de Alvear del kirchnerismo.  


     

Esta nota estaría incompleta sin recordar que en Mercedes también se realiza “La Fiesta Nacional del Salame Quintero”


26-10-2013
EL CANDIDATO IMPERTURBABLE*




Daniel Scioli es un político integrante de un grupo generacional nacido a la política con la revolución conservadora de los noventa, que venía a enterrar definitivamente el estado de bienestar nacido a partir de la crisis mundial de 1929 y potenciado y desarrollado en la década del primer peronismo.
Carlos Reutemann, Palito Ortega, Daniel Scioli, son ejemplos exitosos surgidos de la intuición de Carlos Menem, quien en su momento de esplendor tenía la varita mágica para convertir en actores políticos a figuras populares provenientes del deporte o del espectáculo. Tienen la particularidad de un discurso insustancial, poblado de superficialidades, que transita por un sinnúmero de lugares comunes, de apelaciones al optimismo irreductible, de buenas intenciones. El ejemplo cundió y pasó a formar parte de la era de la videopolítica y la despolitización, en la que los que parten de un conocimiento adquirido en otros ámbitos ajenos al político, tienen un hándicap precisamente por lo que carecen, es decir de su conocimiento político y de la preparación necesaria para ejercerla.
Desde el campo empresario llegaron Mauricio Macri, Francisco de Narváez, Juan Carlos Blumberg, Alfredo Olmedo, y del artístico y deportivo, Miguel del Sel, Nacha Guevara (quien después de ser elegida se arrepintió), y Héctor Baldassi, entre otros.
Emparentados en un discurso superficial y muchas veces soporífero, se incluyen políticos que han hecho los pasos escalofonarios  como Hermes Binner, Fernando de la Rúa, Sergio Massa, y siguen los nombres.
Pero de todos los que ingresaron de afuera de la política, el que ha llegado más lejos y va por más es Daniel Scioli. Diputado con Carlos Menem, Secretario de Deportes en la breve presidencia de Adolfo Rodríguez Saá, continuó en el mismo cargo con su sucesor Eduardo Duhalde. En su libro “Memorias del incendio. Los primeros 120 días de mi presidencia”, el ex gobernador y presidente elegido por el Parlamento sólo le dedica una línea a su designación: “Daniel Scioli, que era diputado nacional en representación de la Capital Federal, continuó como Secretario de Turismo”.
Cuando se preparaba para postularse a candidato a Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Kirchner le propuso integrar la fórmula presidencial. Sobre el particular hay dos versiones: la primera, que ante la posibilidad que Duhalde le impusiera a Roberto Lavagna, Kirchner se anticipó proponiendo en el cargo a Scioli que siempre midió bien en las encuestas. La otra es que Duhalde buscaba un reaseguro y podía proponer a su mujer Hilda Chiche Duhalde; anticipándose a la jugada le propuso el cargo al diputado Scioli. Así lo cuenta Daniel Miguez en su libro “Kirchner íntimo”: “A Eduardo Duhalde le gustaba Roberto Lavagna como compañero de fórmula de Kirchner. Pero chocaba con dos problemas: no querían ni Lavagna ni Kirchner. Pese a eso, la potencial candidatura del economista fue una posibilidad que dio vuelta hasta último momento, exactamente hasta que Néstor eligió a Daniel Scioli. Ante de eso hubo un intento del duhaldismo para que la candidata a vicepresidenta fuera Hilda “Chiche” González de Duhalde, y también rondaron los nombres de Alberto Balestrini y Juan José Álvarez. Para el viernes 21 de febrero del 2003 estaba prevista una reunión en la casa de Carlos Ruckauf en el Barrio Norte de Villa Gesell, entre el anfitrión Duhalde y Lavagna. Kirchner supuso que se trataba de un último intento de convencer al ministro de Economía y decidió actuar rápido. Citó en secreto a Daniel Scioli, para esa misma noche, en la Casa de la Provincia de Santa Cruz…….Le propuso que sea su candidato a vicepresidente. Scioli le dijo que en sus planes estaba ser candidato a jefe de Gobierno porteño, pero acotó sin dudar. “Contá conmigo. Me pongo  a trabajar ya” fue su respuesta
Walter Curia, periodista de Clarín, en su libro “El último peronista. La cara oculta de Kirchner”, al respecto escribió: “Scioli había sido convocado por Kirchner el viernes a la Casa de Santa Cruz…Allí fue la oferta: “Quiero que me acompañes en la fórmula. El cargo yo no se lo ofrecí a nadie. Sos el único con el que hablé el tema”, le aseguró Kirchner…..Ya había jugado la carta de su vice en una exclusiva con Clarín con la intención de frenar una operación del sector predominante en la CGT -“los gordos”, como los bautizó el periodista Ricardo Ríos- que buscaba convencer a Duhalde de postergar las elecciones y postular a Roberto Lavagna…… Scioli presumía de ser el dueño del secreto mejor guardado del país cuando el diario lo sorprendió en la puerta de su habitación del Costa Galana, en Mar del Plata, adonde había ido para el casamiento del dueño. Clarín anunciaba que era el vice de Kirchner”
El testimonio de Alberto Fernández en su libro “Políticamente incorrecto. Razones y pasiones de Néstor Kirchner”, discurre por caminos similares aunque aporta algunos datos interesantes: “Así a pesar de que Daniel Scioli se había comprometido con las formas políticas del menemismo, poco a poco Kirchner empezó a sentir simpatía por él y a percatarse que era un político popular, dos razones importantes para invitarlo a integrar la fórmula”. También confirma que Duhalde también pensó en su mujer como vicepresidenta para custodiar a Kirchner. Según el futuro jefe de gabinete, Kirchner le dijo a Duhalde telefónicamente: “No voy a permitirlo porque no soy  el títere de nadie”. Con relación a la jugada de Lavagna como vicepresidente sostiene “que el objetivo era que rechazara la propuesta para desgastar la candidatura del gobernador de Santa Cruz y sustituirlo”    
Scioli luego, fue dos veces gobernador de la Provincia de Buenos Aires y ahora finalmente espera que su lealtad sea premiada como candidato presidencial del Frente para la Victoria.
Como legislador su trabajo no fue lucido. Entre 1997 y 1999 presentó 20 proyectos, la mayoría vinculados al deporte. Entre 1999 y el 2001 aumentó a 120 proyectos, vinculados a homenajes, reconocimientos, subsidios para obras sociales o fomento de pequeñas y medianas empresas.
EL MISTERIO SCIOLI


Su biógrafo Mariano Confalonieri en el libro “El candidato, vida pública y privada de Daniel Scioli”: “La gente conoce a Scioli, y ese es su mayor capital político. ¿Pero qué es lo que conoce? Que fue un motonauta exitoso, que perdió su brazo derecho durante un accidente en lancha en el Río Paraná, que luego entró en política “sin los viejos vicios”, que fue diputado, funcionario nacional durante las presidencias de Adolfo Rodríguez Saá, Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner- con éste último vicepresidente-


Dos veces fue electo gobernador de la provincia más importante del país, pese a ser un porteño que tenía- al momento de declinar su postulación- todas las probabilidades de consagrarse como jefe de Gobierno por el peronismo en la Capital. Hacia afuera, Scioli siempre se muestra tranquilo, sin nervios, no se inmuta cuando lo atacan -incluso, a veces, en forma virulenta- y repite una serie de palabras positivas como si fuera un sacerdote profesando la palabra de Dios. “Con fe, con optimismo, con producción”, son las que más repite. Es motivo de burla por su discurso propositivo. Sin embargo, la burla proviene de sus rivales, porque entre la gente, aún con un mandato y medio encima, sigue teniendo muy buena aceptación, según lo indican todas las encuestas.  Es la misma razón por la que el kirchnerismo lo ha utilizado para ganar elecciones en 2003, 2007, 2009 (fue candidato testimonial) y 2011. Es la misma razón por la cual Cristina Kirchner lo ve como un enemigo a derribar. Pero Scioli además de ser un dirigente con buena aceptación entre la opinión pública, es un misterio. Nadie sabe qué piensa. ….Scioli no tiene título universitario, no lee porque se aburre; para no perder tiempo adelanta las películas. Es un consumidor serial de encuestas; quiere saber, todo el tiempo, qué piensan los bonaerenses. Es su principal asesor de imagen. Para algunos es un fiel soldado del kirchnerismo, que se inmoló con las candidaturas testimoniales y con la batalla contra el campo. Para esos mismos es un sumiso que acató cuanta orden le impusieron desde la Casa Rosada -hasta llegar al ridículo de que le eligieron por él su vicegobernador-. Para otros, es un político conservador que está esperando que llegue su hora como candidato a presidente, cuando a Cristina Kirchner se le venza el mandato. Esa porción de la sociedad especula que, por dentro, Scioli piensa todo lo contrario que el kirchnerismo: que está en contra de la inflación, de los juicios a los represores, de los planes sociales, de la Ley de Medios, de la estatización de Aerolíneas Argentinas y de las AFJP. Pero como él nunca respondió a esas inquietudes, no se sabe si eso es cierto……Un hombre que tiene serios problemas para administrar la provincia de Buenos Aires –más allá de factores externos que lo condicionan- ; un hombre que eligió la represión como política de Estado para resolver la inseguridad; uno que es calmo hacia afuera, pero tiene arranques de ira hacia adentro; un hombre que prepara su candidatura presidencial, que hoy es su máxima obsesión……Su vida política se filma o se graba. Parece un multimedios rodante” Todo está cuestionado en su trayectoria, incluso su rutilante carrera de motonáutica. Tanto la revista XXIII como el periodista  Mariano  García Barace, entre otros, pusieron en dudas sus éxitos deportivos. Éste último escribió: “A mediados de los años 80, mientras disfrutaba del ocio, andaba en lancha por las islas del Tigre. Su padre era propietario de Casa Scioli dedicada a la venta de electrodomésticos y artículos de lujo. En 1987 su fortuna le permitió adquirir una potente embarcación diseñada y construida por el genio del Politécnico de Turín, el campeonísimo Fabio Buzzi. Según los expertos ‘las lanchas del FB Design ganan solas’, porque son las mejores del mundo. Así comenzó a ganar fácilmente las competencias locales de un deporte reducido a unos pocos. Posteriormente perdió su brazo derecho en una carrera en diciembre de 1989. Scioli nos hizo creer que era como Guillermo Vilas, Carlos Monzón o Diego Maradona. Su fama deportiva se la debe exclusivamente a Buzzi y a la financiación aportada por Menem mediante la publicidad de la marca YPF, y otros subsidios que le permitieron disfrazarse de gran campeón. Fabio Buzzi no era un personaje secundario como nos hacían entender los periodistas Enrique Moltoni y Horacio Larrosa en las carreras que trasmitía exclusivamente el Canal 9 de Alejandro Romay, socio del padre de Scioli. Se omitía explicar quién conducía la lancha. El “ingeniero” Buzzi, según estos periodistas era sólo un copiloto o asistente técnico. Fabio Buzzi, uno de los pilotos más exitosos en la historia de la motonáutica. Multicampeón italiano y europeo, record mundial de velocidad 1979 y 1992, Campeón Mundial 1984, 1988, 1994, 1995, 1996, 1997, Campeón Americano 1995, record de velocidad 1999 (Miami – Nassau), y otros records en 2001, 2002 y 2004. Como ingeniero constructor, las lanchas del FB Design ganaron 42 campeonatos mundiales, 22 europeos, 27 italianos y 56 records mundiales de velocidad.”
Scioli carece de estructura política, pero eso no le impidió realizar su rutilante carrera política. Durante su primer mandato de gobernador, como no tuvo influencia en la confección de las listas de legisladores provinciales sólo tuvo tres diputados propios y ningún senador de los trece elegidos por el Frente para la Victoria. En las elecciones del 2011, su poder en el Congreso provincial no cambió.  En 2007 obtuvo el 53% de los votos y en el 2011 el 56%.

LOS CORTOCIRCUITOS CON EL KIRCHNERISMO


Daniel Scioli comenzó su vicepresidencia suponiendo que tenía una parte del poder político. Por eso el 13 de agosto del 2003, durante el coloquio anual  de IDEA, ese año en Tucumán, anunció que el Congreso descongelaría las tarifas de gas y electricidad. Kirchner reaccionó con dureza impensada. Ordenó a todos sus ministros que no le atendieran el teléfono al vicepresidente. Removió a todo el equipo de la Secretaría de Turismo que le respondía a Scioli  y cuya permanencia fue una solicitud del motonauta aceptada por el Presidente. Mariano Confalonieri pone en boca del santacruceño la frase: “Si por mí fuera, le sacaría hasta el mozo”. Cuando pedía una audiencia, pasaba horas esperando ser recibido. Ahí comprendió que su lugar era tocar la campana en el Senado. Pero ni siquiera ahí pudo evitar los cortocircuitos con los Kirchner. En este caso fue con Cristina. El 23 de diciembre del 2005 cuando la actual presidenta había sido elegida senadora por la Provincia de Buenos Aires, cometió la gaffe de llamarla “senadora por Santa Cruz. En otra oportunidad la designó por decreto en la Comisión de Asuntos Penales, desplazando al senador socialista Rubén Giustiniani y todo hacía presumir a pedido de Cristina. La información llegó a los diarios.  Con su conocido temperamento le dijo: “No me extraña que la Presidencia (del Senado) porque ya hubo otras actitudes vinculadas con estas cuestiones que aparecen en la prensa y nadie saben de donde surgen, sobre situaciones que no suceden”. En otra ocasión, lo increpó con adjetivos duros por la falta de conocimiento de los reglamentos del Congreso.
Scioli se dedicó a realizar homenajes y reconocimientos a figuras artísticas y deportivas.
Cuando trascendió que en materia de seguridad les había dicho a los familiares de una víctima que “tenía las manos atadas”, Néstor Kirchner le preguntó en un acto público poco antes de su muerte que “el gobernador debería decir quiénes le atan las manos”.
Durante todo el año 2012 y buena parte del 2013 Cristina lo sometió a fuertes críticas públicas, incluyendo la de ser un mal administrador,  y a un fuerte apretón financiero. Dos meses antes de las PASO, le increpó que no la defendían de las acusaciones sobre corrupción que la alcanzaban junto a Néstor, que dominicalmente derramaba desde los multimedios de Clarín, su mejor empleado, Jorge Lanata.
Entonces el gobernador pronunció una de sus frases más logradas: “Entre el odio y el fanatismo, por el bien del país, tiene que haber un punto de encuentro en los argentinos.” Y le dio, con sus mensajes gestuales,  un reportaje a Clarín, el 2 de junio, donde en forma astuta afirmó: “Entiendo a la Presidenta: yo también quisiera que me acompañen más.”  Ya conformadas las listas con Martín Insaurralde como primer candidato a diputado por el Frente para la Victoria y con el gobernador adentro, concedió un reportaje a Perfil el 28 de julio donde declaró:  “¿Cómo voy a ayudar a destruir lo que yo mismo ayudé a construir? ….Si a mí me votaron hace un año y medio en una boleta que decía: “Cristina, Scioli”, durante cuatro años yo tengo que trabajar de esa manera”. El 3 de agosto le confesó a “La Nación”: “Y un día le pregunté a Cristina ¿Qué pensaba “el Flaco” de mí? Porque a veces me quedaba una sensación encima, con esas reacciones que él tenía. Estaba esa contradicción: por un lado, una situación tensa y, por el otro, cada vez me daba más confianza y responsabilidades…..Entonces Cristina me dice: “Él tenía una cosa muy especial con vos, por todo lo distinto que hiciste en la política, cuando vos demostraste que no abandonás ante las dificultades, que ponés el hombro donde lo tenés que poner. Eso me quedó muy marcado. Y creo que por eso dije en El Mangrullo: “Flaco” conmigo no te equivocaste”  
LA LEALTAD DE SCIOLI
Visitó a Menem en su detención domiciliaria, acompañó a Adolfo Rodríguez Saá, cuando desde San Luís anunció su renuncia a la Presidencia de la Nación después que la mayoría de los gobernadores le retiraran el apoyo en Chapadmalal, le cortaran la luz y le retiraron la guardia, y se mantuvo dentro del kirchnerismo, más allá de todos los encontronazos y tropiezos. Sin embargo estuvo a punto de romper su línea de conducta. Ante la pregunta de Fontevecchia en el reportaje citado: ¿“Su jefe de gabinete Alberto Pérez, negoció lugares en la lista de Massa hasta el sábado mismo del cierre de listas”?, Scioli respondió: “son todas habladurías. Guíense por las decisiones que yo tomo y no por las conjeturas”.



Sin embargo, lo que posiblemente haya ocurrido  ha quedado consignado en el libro de Pablo de León “Massa. El salto del tigre”: “Scioli era parco en las charlas pero pidió, sentado en uno de los mullidos sillones, que fuera sumado al convite Francisco de Narváez. En las tertulias finales en La Ñata, Karina Rabolini insistió varias veces en que era importante que se sumara al esquema el diputado que había vencido a Néstor en 2009. El pedido fue aceptado y el 20 de junio, Día de la Bandera, hubo una cumbre entre el tigrense  y el titular de la Unión Celeste y Blanca, en la que no se avanzó mucho. Tuvieron diferencias respecto de lo que debería hacerse luego de alcanzar la victoria electoral, que, al sumarse todos ellos en una misma lista, se podía estimar en un 50%, o incluso más….. Los intendentes del esquema massista querían, mayoritariamente, que el gobernador estuviera presente y que además se hablara con Mauricio Macri para que los intendentes que estaban en su ejido integraran también el acuerdo. Karina Rabolini era fija para el primer o segundo lugar por el sciolismo. Omar Plaini, Natalia Gambaro y Gustavo Ferrari eran defendidos si se ampliaba el acuerdo por el lado de De Narváez y Moyano. Los del Frente Renovador eran los mismos que terminaron en la lista presentada pocos días después. Siempre con Massa a la cabeza. Ahí la cuestión se complicó mucho más, hasta que se volvió al principio: un acuerdo Scioli- Massa, Massa-Scioli, dividiendo las listas de diputados nacionales en un 50% para cada uno, y las de diputados provinciales un 65% para el Frente Renovador y un 35% para el sciolismo…..


Pero el viernes 21 de junio, poco más de 24 horas antes del cierre para las presentaciones, uno de los intendentes más hábiles para la política llamó al de Tigre y le dijo: “ Los veo retrocediendo, me parece que se asustaron…..Ese día feriado, en la casa quinta de Scioli, apoltronados en los sillones estaban el gobernador  con su esposa, un habitual portavoz suyo y presidente del Banco Provincia, Gustavo Marangoni y en los ambientes contiguos, entrando y chusmeando la reunión, andaban Samid, el experimentado peronista porteño Jorge Telerman y Alberto Pérez. …..Scioli explicó: - No quiero quedar como un desleal, como alguien que cambia en los momentos difíciles. Aparte no tiene que ver con mi historia personal. Casi las mismas palabras que días después usaría ante los medios para confirmar su permanencia al lado del Gobierno. -Decidas lo que decidas, Sergio, está muy bien- agregó Scioli, liberando de todo compromiso al intendente.- No, yo ya decidí- ratificó Massa. – No me sentiría cómodo, no sería yo haciendo eso -insistió Scioli sobre el posible salto fuera del oficialismo.
Se saludaron cordialmente y Massa se fue.”
SCIOLI Y EL PODER ECONÓMICO
La idea que Scioli es un envase cuyo contenido se adecúa a quien lo dirige es una aseveración que goza de importantes elementos y visos de realidad. En ese caso, la lealtad levantada adquiere la categoría de obediencia. Y que una eventual presidencia implicaría que el sería el estuche y el contenido lo pondría el poder económico. Una anécdota contada por Mariano Confalonieri, da razonabilidad a esta sospecha. Se trataba de una licitación para restaurar la vieja terminal de micros de Mar del Plata. Se la disputaban el poderoso empresario multimediático local  Florencio Aldrey Iglesias, dueño del Hotel Hermitage, y el Grupo  Corporativo Roig que tiene negocios en España  y en varios países de África. Estos últimos habían contratado al famoso arquitecto tucumano César Pelli, quien diseñó las Torres Gemelas Petronas, en Malasia.
“Fue una tarde calurosa de enero. En una suite del Hotel Hermitage, sentado en dos sillones estaban el gobernador de la Provincia de Buenos Aires Daniel Scioli; el intendente de la Ciudad de Mar del Plata Gustavo Pulti; el empresario español, Francisco “Paco” Roig, y el publicista marplatense Roberto Fiocca.  La reunión la había convocado Scioli para acercar a las partes (su amistad con Iglesias venía de lejos). La presencia de Pelli y los lazos de Fiocca con un sector del kirchnerismo eran un escollo para el gobernador  aunque, en rigor, quería deshacerse de ellos para dejarle servido en bandeja el negocio a Aldrey, optó por buscar un acuerdo entre las partes.
“El gallego” se acercó a la ventana, corrió las cortinas, desde donde se apreciaba una vista panorámica de Mar del Plata, y llamó a Roig. – Mirá hacia afuera, ¿Ya ves Paco? Todo esto que ves acá es mío. Tú te has equivocado de socios.
Se volvieron a sentar. Iglesias dirigió la mirada hacia Scioli y Pulti y les exigió con el dedo en alto: -Tú y tú se levantan y se van, no tienen nada que hacer en esta reunión.
Para el asombro de Paco Roig, el gobernador y el intendente obedecieron. El empresario quedó horrorizado con semejante muestra de poder. Más tarde le confesaría a Fiocca: - Roberto, te quiero mucho. Pero he hecho negocios en todas partes del mundo y nunca he visto que un empresario diera órdenes a un alcalde y un gobernador.
Roig se tomó un avión rumbo a España y jamás volvió… Pulti les había prometido a los empresarios que si le traían a César Pelli a Mar del Plata les daría la llave de la ciudad. Pero luego cuando el negocio se desmoronó, admitió su error ante uno de ellos: -Me equivoqué. ¿ Sabés lo que es tener todos los días la tapa del diario La Capital en tu contra?”
Más allá de la verosimilitud de la anécdota, las características exhibidas hasta el presente por Scioli la hace creíble. La misma historia reemplazando a Scioli por Néstor Kirchner o Cristina Fernández la hacen absolutamente desechable por inverosímil. La diferencia está a la vista.
EL CANDIDATO IMPERTURBABLE
Nadie con tan poco ha llegado tan lejos y legítimamente va por más. Es un soldado del kirchnerismo, espera ser ascendido a general y recoger la herencia. La historia, que es muy imaginativa, lo ha colocado a la izquierda de su competidor más firme que es Sergio Massa. 
Como bien escribió el ensayista Alejandro Horowicz: “Cuando la presidenta ganó en 2011, el gobernador de la provincia de Buenos Aires hizo saber que aspiraba a sucederla. En un mapa político donde la "traición" sigue siendo la principal categoría analítica, donde las explicaciones no abandonan la pobreza del juicio moral, Daniel Scioli hace saber una y otra vez que él es leal. Negarlo es casi imposible…..La proclamación de Massa como candidato a diputado, lo coloca a Scioli a su izquierda”
Difícil es encontrar una explicación a su carrera rutilante, indemne a fracasos de gestión que nunca se traducen en las urnas. Mariano Confalonieri  propone una hipótesis cuando  escribe: “Oculta sus ideas, opta por el silencio o esquiva todas las preguntas que lo obligan a una definición con una habilidad que ningún otro político tiene en el país…..Como no expresa sus ideas, la gente proyecta en Scioli la imagen del candidato que desea, aunque no lo sea”




Algunas de estas características han sufrido una pequeña mutación en la presente campaña electoral. Se ha visto un gobernador menos anodino y con un discurso con algún pequeño voltaje, pero siempre manteniendo su actitud de candidato imperturbable.
La historia suele también tener giros imprevistos. El vituperado gobernador es el que debe ponerse la campaña al hombro del Frente para la Victoria para tener posibilidades de ser el heredero en el 2015, intentar achicar la diferencia con su principal competidor externo Sergio Massa surgido del vientre del mismo agrupamiento político.       
¿Será posible que su lealtad lo haga acreedor a  ser merecedor a lo que aspira desde hace mucho?
¿Cristina lo designará su sucesor?  ¿O se le pasará la factura de la derrota en la Provincia de Buenos Aires?  Personalmente creo que no será el heredero, salvo que el pragmatismo supere toda otra consideración. Pero vuelvo atrás y doy por no escritas estas dos últimas líneas, teniendo presente aquella sabia frase de Samuel Goldwin: “No conviene hacer pronósticos, sobre todo hacia el futuro”  

Publicada en el Número - 60 - Revista La Tecl@ Eñe - Octubre - Noviembre de 2013

24 octubre 2013

                                                                                    El Tren 24 10 2013                                                            
                                                                 Debaten antes de las elecciones del domingo 27 10 2013

               
                                                                 
              El Tren 17 10 2013
                                                                Liliana Mazure Candidata a Diputada FpV

                                                             

23 octubre 2013

El 27 y después

Gabriel Fernandez y Hugo Presman en el bar de la esquina, charlando sobre el futuro inmediato del kirchnerismo y el 2015

22 octubre 2013

LA CAMPAÑA DIETÉTICA








La politización de la sociedad argentina desde el clivaje histórico del 19 y 20 de diciembre del 2001, acentuado en forma significativa por la década kirchnerista, es una aseveración que tiene sus raíces profundas en una realidad modificada por obra y acción de la política. Como sostenía el inolvidable dirigente sindical Germán Abdala: “La política es la herramienta principal que tenemos los pueblos para transformar las sociedades donde vivimos, para poder poner un manto de equidad frente a los poderosos. Porque la guita y las armas siempre las tuvieron ellos. Sólo la participación, organización, movilización y unidad de nuestro pueblo pudieron generar proyectos colectivos que plasmaran los intereses de las grandes mayorías relegadas históricamente.” En el mismo sentido, Lula ha afirmado: “Le digo a los jóvenes, fuera de la política no hay solución”.  Y la política enamora cuando se observa que es el instrumento de cambios y no de consolidación del statu quo. Y como decía un general que dividió a la historia argentina en un antes y un después, “para hacer tortilla hay que romper los huevos”. Es decir que hay que confrontar con los poderes estatuidos y para hacerlo con probabilidades de triunfo hay que contar con los actores sociales y ampliarlos permanentemente. La idea de que es posible obtener cambios importantes consensuando con los sectores que se va afectar, es un oxímoron que sólo puede habitar en los sueños de los ingenuos o el sinuoso sendero de los hipócritas.






El 19 y 20 de diciembre, a diferencia de los otros dos hitos del siglo XX, el 17 de octubre de 1945 y el Cordobazo del 29 de mayo de 1969, se hizo desde una fuerte impronta de la antipolítica sintetizada en la malhadada consigna de “que se vayan todos”. De ahí que de los pies multitudinarios tomando las calles, se derivaron dos discursos: uno interpretado con claridad por Néstor Kirchner, de predominio de la política sobre la economía, de recuperar la autoestima nacional, de reconstruir el Estado y recuperar retazos de aquel que justamente se llamó de bienestar, y de hacer borrón y cuenta nueva con una parte del legado de los noventa. El otro discurso  denostaba prácticamente a la política y los políticos y le concedía un hándicap importante a todos aquellos que vinieran por fuera de la política. La confusión y la claridad que contradictoriamente se entrelazaban, se exteriorizaron en las elecciones del 27 de abril del 2003: en la suma de votos del primero y el tercero (Menem y López Murphy, emblemas de los noventa), obtuvieron el 41% del total de los sufragios, pero cuando había que ir al ballotage, la claridad del cambio obligó a Menem a una desdorosa huída y Néstor Kirchner inició una década de cambios importantes y el sostenimiento de varias continuidades significativas.         

DESPUÉS DE LAS PASO Y DE CARA A LAS DE OCTUBRE
Con las peculiaridades de una elección legislativa, los resultados de la misma determinaron como ganadores a los candidatos de discursos insustanciales, aquellos que reemplazan la claridad ideológica por frases que parecen extraídas de un manual de autoayuda, sin definiciones sobre temas fundamentales, con un lenguaje poblado de diálogos y consensos, de república e instituciones.
Ese es el discurso con el cual el poder económico intenta  recuperar el gobierno para olvidarse del mismo cuando lo consiga; pero, sin embargo, este relato parece sintonizar con el cansancio que un electorado mayoritario de la población expresa por una década de confrontaciones que en sus aspectos más positivos ha permitido mejorar significativamente la situación económica y que disfrutan principalmente lo que manifiestan disconformidad.
Pareciera que luego de diez años de una fuerte y positiva politización, uno de los discursos surgidos del 19 y 20 de diciembre, el despolitizado, derrotado por el politizado, que ha invernado en el interior de aquél,  ha resurgido en estas elecciones y volverá a manifestarse en octubre.   
Conscientes de esta situación, los publicistas de los partidos con significativos porcentajes electorales, han proporcionado a sus candidatos spots donde nos enteramos dónde estudiaron, cuántos hijos tienen, en qué barrio viven, con mucho más intensidad que aquello que van a proponer. A contrario sensu, el candidato a diputado por la Provincia de Buenos Aires Sergio Massa despliega una campaña que dentro del mismo discurso insustancial, formula  promesas,  más cercana a las posibilidades de un presidente que de un diputado cuya accionar queda diluido en un cuerpo de 257 integrantes.
CONTRADICCIÓN Y REAFIRMACIONES
La campaña de Martín Insaurralde tiene un tono poco politizado que contradice el fuerte énfasis que el Frente para la Victoria ha hecho de la política. Los discursos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández están saturados de posicionamientos y definiciones políticas. A diferencia de Scioli, Massa, Macri, Binner, De Narváez, ningún discurso de la Presidenta puede dejar indiferentes a seguidores y opositores. Las medidas y el relato, con sus claroscuros, y su condición de mujer, explican las olas de odios, broncas, denuestos e infamias que cosecha de sus adversarios y el amor intenso de muchos de sus seguidores. Es posible que una explicación pueda encontrarse en una anécdota de fuerte contenido que desarrolló el sindicalista del SADOP ( Sindicato Argentino de Docentes Privados)  Horacio Ghilini, que se inicia lejos de lo que estoy intentando explicitar pero que concluye en forma muy didáctica: cuando se produjo el levantamiento de los carapintadas en la semana santa de 1987, un joven Horacio Ghilini, con la memoria fresca de los horrores de la dictadura establishment- militar,  se acercó al dirigente sindical de los fideeros Miguel Gazzera, que muchas veces fue considerado el principal asesor del lobo Vandor para preguntarle si existía la posibilidad de un golpe de estado. El fundador de las 62 organizaciones le respondió: “No, no va a haber un golpe de Estado. El pueblo está lejos del poder." Me acuerdo siempre de ese tema, dice Ghillini, de la cercanía del pueblo con el poder como un parámetro para juzgar hasta dónde el sistema te deja avanzar. Hoy, viéndolo con el diario de muchísimos lunes después, con la historia, veo que la asonada tenía que ver con un condicionamiento de la impunidad, fundamentalmente desde el punto de vista de los juicios, no tenía que ver con la disputa de hegemonía entre bloques económicos, que es la respuesta que me da Miguel de alguna manera, cuando el pueblo está cerca o no del poder. El kirchnerismo puso al pueblo muy cerca del poder y de las decisiones.”
Para aquellos que desde una superficialidad y frivolidad notable reducen el kirchnerismo o al chavismo a un mero relato o peor a un simulacro y se referencian en el Brasil de Lula, omiten o ningunean afirmaciones en contrario del  propio ex presidente del Brasil que no duda en sostener: “Tuve el gusto de ser presidente en un momento de oro para América Latina, de convivir con Néstor Kirchner y con Hugo Chávez. Dos personalidades que pensaban en los más pobres. No conseguimos todo lo que debíamos hacer, pero nuestra región está mejor que hace diez años. Son dos ejemplos a seguir.” 
Otra anécdota, separada por décadas, que también lo tiene como protagonista a Gazzera permite, entrelazando ambas, establecer al kirchnerismo como el más cercano continuador del peronismo histórico, que se parecen hasta en los odios viscerales que despiertan. “El 25 de septiembre de 1955 - recuerda Miguel Gazzera- el General Lonardi concedió una audiencia a lo que quedaba de la conducción de la CGT. Los compañeros estaban en la antesala cuando por el despacho pasó un marino. Se detuvo, les preguntó quiénes eran y qué esperaban. Respondida la pregunta, los miró detenidamente y les hizo explotar esta sentencia: “Sepan ustedes que la revolución libertadora se hizo para que en este país el hijo del barrendero, muera barrendero. Era el Contraalmirante Arturo Rial”  (“Peronismo, autocrítica y perspectiva” de Miguel Gazzera, Pagina 64, citado por Norberto Galasso “Cooke: de Perón al Che. Una biografía política” Página 51
Para aquellos que dudan como los gobiernos populares son presionados por el poder económico, es interesante lo que escribió el prestigioso economista Eduardo Basualdo en su libro “Estudios de historia económica Argentina”: “En síntesis, durante los primeros gobiernos, el peronismo consiguió disciplinar a varios de los sectores centrales de la agotada economía  agroexportadora pero fue doblegado por fracciones del capital que conducían la actividad dinámica promovida. Entre ellos se encontraba, además del capital extranjero, la fracción dominante de la oligarquía argentina. Es cierto que desde el gobierno se alentó y promovió  una fuerza propia dentro del empresariado industrial, pero no es menos evidente que esa burguesía nacional era estructuralmente endeble y, quizá, más dependiente en términos ideológicos y productivos de los sectores dominantes que de la concepción  y la iniciativa gubernamentales, aspecto que afloró cuando, en la década del cincuenta, surgieron problemas económicos. El principio del fin del gobierno peronista comenzó cuando la rentabilidad obtenida  por las fracciones industriales dominantes empezó a descender. Entiéndase bien, a disminuir respecto a la “época de oro” (40% de rentabilidad sobre el capital invertido en 1949 para las subsidiarias extranjeras), ya que seguía siendo notablemente alta en términos  históricos e internacionales ( entre el 17 y el 18% en 1952 y 1953). Ante esta situación, y tal como lo harán sistemáticamente en los años posteriores, las fracciones dominantes del capital llevaron a cabo una ofensiva política, ideológica y económica para instalar socialmente la convicción de que el problema radicaba en los excesivos gastos estatales, y en el elevado nivel de los salarios.  En esas circunstancias, como lo han destacado algunos autores, la posición de la burguesía nacional no se diferenció demasiado de la adoptada  por las fracciones empresarias dominantes.” ( Página 52 obra citada)               
CAMPAÑA DIETÉTICA


Esta campaña de bajas calorías, con fuertes rasgos de despolitización, es contradictoria con la fuerte politización de la última década. También en el 2003, después del clivaje del 2001, el pasado parecía triunfar en primera vuelta, hasta que en el balotaje frustrado por la segura derrota del candidato que corporizaba ese pasado, emprendió la retirada y dio paso a las políticas que nos han conducido hasta este presente. En algún momento, que ojalá sea próximo, mayoritariamente el pueblo volverá a apostar al  futuro, asentado en el recuerdo que los mejores años siempre estuvieron asociados a los movimientos nacionales y populares. En esta coyuntura dificultosa electoralmente y con algunos problemas económicos complicados que hay que afrontar con audacia y equilibrio político, parece prudente acudir al ensayista y político marxista, Antonio Gramsci para posicionarse: “Hay que actuar con el pesimismo de la inteligencia y el optimismo de la voluntad”
14-10-2013     


20 octubre 2013

MESA REDONDA EN EL PROGRAMA “PARTE DE LA RAZÓN”

MESA REDONDA EN EL PROGRAMA “PARTE DE LA RAZÓN” CON LA CONDUCCIÓN DE LUIS NOVARESIO SOBRE LA OPERACIÓN DE CRISTINA FERNÁNDEZ, COMO SE INFORMÓ Y LAS POSIBLES CONSECUENCIAS POLÍTICAS
PARTICIPARON LOS PERIODISTAS: CYNTHIA GARCÍA, GABRIEL LEVINAS, PABLO ROSSI Y HUGO PRESMAN